Adrián Solano niega ser un “enchufado”: No tengo ningún nexo con el Gobierno
El “esquiador” venezolano, Adrián Solano, relató a Contrapunto cómo comenzó la aventura que lo hizo saltar a la palestra pública y que generó reacciones de sorpresa, risa, crítica, especulaciones y burlas.
Detalló que conoció a su entrenador César Baena hace poco más de un año en una actividad de la Organización Bolivariana Estudiantil (OBE), que dirigió cuando estaba en el liceo.
“Él se presentó, habló de su trayectoria como esquiador profesional, nos contó sobre su Récord Guinness y, por último, nos invitó a practicar el esquí nórdico. A mí me pareció interesante porque es algo extremo, y como en mi personalidad está hacer cosas distintas de las que hacen los demás, pues lo intenté. A mí me gustan los retos, no me gusta lo sencillo”, contó.
El atleta aseguró, además, que hasta que conoció a Baena solo había practicado béisbol y fútbol, pero como hobby, nunca nada profesional.
Al ser interrogado sobre cómo consiguió el dinero para viajar al Mundial de Esquí Nórdico, celerbrado en Lahti, Finlandi, Solano afirmó que trabajó mucho y tuvo varios empleos para conseguir el dinero necesario. Destacó que también contó con la ayuda de su familia y amigos.
“Hasta mi abuela, y esto me da mucho sentimiento, me dio su pensión en aquel entonces, porque no me alcanzaba para comprar el pasaje con lo que yo tenía. Obviamente con ese poco dinero de mi abuela no fue que resolví, pero fue un granito de arena. Y ver que mi familia me dio lo último que tenía, que en la casa no había un plato de comida pero con todo y eso me apoyaron porque creían en mí, fue lo que me impulsó”, dijo.
Admitió que se le partió el corazón después de que, con tanto esfuerzo, llegó a París y le dijeron que iba a ser deportado porque las autoradidades no creían que fuese un esquiador profesional.
“Yo me endeudé, pasé tanto trabajo como para que esa gente allá me dijera que no me dejaban entrar porque lo que yo quería era emigrar, porque aquí estamos pasando hambre. Eso sí me dio vergüenza: que hablaran así de mi país y en el fondo saber que estamos viviendo esta desgracia”, sostuvo.
Soltano también señaló que dada su cercanía con el Gobierno, Baena intentó buscar apoyo gubernamental. Sin embargo, nunca recibió respuesta.
“Yo nunca fui a solicitar apoyo a la sede de ningún ente gubernamental, ni siquiera al IND (Instituto Nacional del Deporte). Pero sí hubo una solicitud formal por parte de César y su equipo, la cual nunca fue respondida. Por eso no nos íbamos a detener”, explicó.
Aseguró, además, que no tiene ningún nexo con el Gobierno. “He asistido a actividades en las que he visto al gobernador o a algún diputado, pero yo he estado al margen de ellos, como cualquier otra persona del pueblo que va y espera algo de ellos. Yo soy uno más que va al Mercal y pelea para que le vendan su bolsita del CLAP. Y eso es lo que me molesta de toda esta historia, que aseguren que el Gobierno a mí me pagó o me está pagando algo”, contó.
Sobre su militancia política, indicó que fue chavista, pero pese a que cree en el Socialismo, no está de acuerdo con la grave situación que hoy vive el país a causa de las políticas de este gobierno.
“Sí, fui chavista. Creo en el socialismo y me parece algo grandioso, pero no me parece lo que estamos viviendo ahorita en Venezuela. Esto de que la gente esté pasando trabajo, esté pasando hambre, pone los criterios en otro plano. Te hace pensar en qué es lo que realmente quieres”.
En este sentido, reiteró que no recibió apoyo de nadie del Gobierno. “La única persona que me ayudó, además de César, fue un finlandés que se llama Aleksi Valavuori. Él ni siquiera sabía de la existencia de Venezuela, pero escuchó mi nombre en un periódico de su país que informó sobre mi deportación en Francia y me contactó. A la única persona ligada al Gobierno que agradezco es a la cónsul”, dijo.
Además, aseveró que no aceptaría ayuda económica del presidente Nicolás Maduro. “Y no por orgullo, sino porque no quiero dinero de nadie vinculado con la política venezolana. No quiero que mi nombre se vincule más a la política. Cuando logre otras metas, que sea porque le “eché pichón” y aproveché el apoyo de la gente que creyó en mí desde un principio; no por nadie que primero me ignoró y luego sí me quiso ayudar para llevarse los créditos”.
Finalmente, pidió a los venezolanos que “dejen de pensar tanto en los políticos”. “El venezolano no necesita políticos, necesita ciudadanos comprometidos para hacer que el país surja. Todos debemos trabajar para ello. Que el policía, en vez de “matraquear” a la gente, se dedique a hacer su trabajo. Lo mismo con los administradores públicos. Que el venezolano no sea visto como oficialista, chavista, opositor o escuálido, sino que todos nos veamos como hermanos. Aquí nosotros vemos una caída como una derrota. Ellos ven una caída como una oportunidad para volverte a levantar”, sostuvo.