¡Golpea el alma! Carta de un hijo a su madre Venezuela
Amada Venezuela
CARTA DE UN HIJO A SU MADRE VENEZUELA
Madre, se acerca la lucha, se aproxima el gran día, y no sabes el miedo que siento cada vez que veo las agujas del reloj moverse, agotando el tiempo.
Dos días, es lo único que falta para definir tu historia, para ver si mis hermanos, al igual que yo, van a salir a defenderte (como lo debe hacer un hijo que nació de tus entrañas).
Nos han separado madre, estamos divididos, ya no somos los hermanos de antes; hay rencor, ira, resentimiento, dolor, y me parte el alma tener que verte llorar por una incesante guerra, que no puedes detener, porque te han dejado débil (te hemos dejado débil), sin fuerzas, sin ánimos.
Perdóname Venezuela, perdónanos. Fuimos personas egoístas, te acabamos; y desde aquí, te observo descalza, con los pies rotos, con harapos, desnutrida y bañada en sangre. Sé que ya no aguantas, no puedes más, pero te prometo que vamos a lograr que seas la de antes, que mis hermanos dejen de pelear, que seamos prósperos.
El 1 de septiembre no sé qué pueda pasar, es el día de un encuentro entre ellos y yo. Siento temor de que no me permitan conversar, y que nos vayamos a los golpes y la violencia. Ya no quiero más sangre, no quiero que sufras por los hijos que quedamos aquí cuidando de ti.
Entiendo tu dolor por mis hermanos que se fueron, porque no soportaron verte así; fueron cobardes y decidieron huir, por miedo a luchar, a recuperarte. Tranquila madre, yo me quedé, y ¡sí voy a defenderte!
Por mis hermanos que están injustamente presos, que fueron atrapados por un gobierno destructor, y sin piedad , ten paciencia; a ellos les queda poco tiempo tras las rejas, y ya verás que de nuevo saldrán a las calles, donde podrán expresar libremente y sin cadenas su amor por ti.
Te pido abras tus brazos, y nos esperes allí, que respires profundo porque pronto, muy`pronto te abrazaremos, le gritaremos al mundo que logramos tu recuperación, que estás gordita y hermosa, y que tus hijos estaremos todos juntos, en unidad, porque en poco tiempo ¡EL CAMBIO SUCEDERÁ!
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