Cómo Baby Shark, un clip de 90 segundos, generó un negocio de 400 millones de dólares

Cuando Kim Min-seok dio luz verde en junio de 2016 para publicar un fragmento de 90 segundos de una canción infantil, no imaginaba el impacto que iba a tener.
Se convirtió en un fenómeno mundial, alcanzando más de 16.000 millones de visualizaciones: el video más visto en la historia de YouTube.
Esa canción era la increíblemente pegadiza «Baby Shark».

No solo cautivó a los más pequeños y aterrorizó a los adultos de todo el mundo, sino que sentó las bases para que su creador, Pinkfong, se convirtiera en una empresa de medios valorada en cientos de millones de dólares.
«No esperábamos que destacara tanto entre nuestro contenido», declaró a la BBC Kim, director ejecutivo de Pinkfong, desde la sede de la compañía en Seúl.
«Pero, en retrospectiva, esa canción se convirtió en un punto de inflexión crucial que marcó el inicio de nuestra expansión global».
Por BBC Mundo