Una estudiante se tiró de un segundo piso para evitar que la violaran
“Ella dice que pensó que podía llegar a agarrarse de una rama, pero es imposible, no lo pensó, reaccionó por instinto“. El que habla es el hermano de Nadia, la estudiante de Medicina que ayer se arrojó al vacío desde un balcón del segundo piso para huir de un hombre que había ingresado por la fuerza a su departamento de La Plata con aparentes fines de abuso sexual. Está en terapia intensiva.
En diálogo con la prensa, Pablo Sepúlveda relató que Nadia (23) es oriunda de Bahía Blanca y que vive desde hace tres años en La Plata, junto a otra hermana de 19, mientras estudia la carrera de Medicina en la universidad de esa ciudad.
Todo ocurrió ayer, la chica cuando regresó a La Plata para preparar un examen que debía rendir este viernes y llegó al edificio situado en las calles 6 y 61. Fue entonces que vio a un hombre que estaba en la puerta, y que cuando ella abrió le pidió si lo dejaba pasar.
“Ella pensó que era un vecino y lo dejó, pero una vez adentro él la golpea, le pega un puñetazo y ahí empiezan a forcejear y empiezan los gritos. La quiso llevar para la habitación de los pelos, ella se logra soltar y escaparse, y cuando va a abrir la puerta se queda con el picaporte en la mano porque él se la traba con el pie”, contó Pablo.
Y continuó: “Entonces la vuelve a agarrar, vuelven a forcejear, la golpea y ella se vuelve a zafar y sale corriendo, no lo piensa y salta del balcón. Ella dice que pensó que podía llegar a agarrarse de una rama, pero es imposible, no lo pensó, reaccionó por instinto”.
El hermano de Nadia aseguró que, para ella, el hombre “no quería robarle, ya que la metió para adentro de los golpes y la llevó a la habitación. Le decía que no gritara, que se callara, ella gritaba auxilio. Por suerte, los vecinos se alertaron todos y salieron pero ya la encontraron en el suelo. Fueron ellos quienes lo detuvieron, él no ejerció resistencia”, agregó el joven.
El acusado, de 33 años, fue retenido en el lugar por los propios vecinos hasta que llegó la policía, ante quien adujo ser un vendedor ambulante.
Según Pablo, luego se determinó que el detenido es oriundo del partido bonaerense de La Matanza y que tiene una enfermedad incurable, por lo que su hermana será sometida preventivamente a los estudios de rigor, aunque aclaró que no llegó a ser víctima de un abuso aunque sí brutalmente golpeada en el rostro, por lo que permanece internada en terapia intensiva.
El joven contó que la familia viajó a La Plata desde Bahía Blanca ayer mismo y que pudieron hablar con la joven, internada en el hospital San Martín.
“Nos dice que no pensó en las consecuencias, sólo en la situación de violencia, porque la agarró a las trompadas, la entró a las trompadas, no el pidió, la billetera, ni la computadora, nada, la arrastro de los pelos a la habitación”, agregó al confirmar que no fue una tentativa de robo.
“Lo primero que me dijo es que está agradecida de que le haya pasado a ella y no a nuestra hermana de 19 años que vive también ahí. Después se flageló diciendo que pensó que era un vecino porque sino no lo hubiese dejado pesar“, concluyó Pablo.
Otro testimonio importante fue el de Lucas, un vecino de Nadia. “Estaba durmiendo y me despertaron los gritos. “Como venían de afuera salí a la calle y la vi tirada en el piso, con su mochila que tenía las cosas desparramadas”, describió el joven al diario El Día.
“Cuando bajaba para ir a ver a Nadia, este tipo lo hizo detrás mío. Al notarlo sospechoso, le pregunté qué hacía en el lugar y me dijo que vivía allí”, aunque esa excusa no le funcionó como antes. “En esta torre vivimos cinco familias y nos conocemos todos”, cerró Lucas.
Con información del diario Clarín.