González López acusó a Estados Unidos de asentar bandas paramilitares
El ministro de Interior y Justicia, Gustavo González López, anunció que el estadounidense Joshua Anthony Holt, alias “Gringo”, y a su esposa de origen ecuatoriana, Thamara Belén Caleño Candelo, guardaban armas de guerra en su casa.
Holt y Caleño, esta última nacionalizada venezolana, fueron capturados en el complejo habitacional de la Gran Misión Vivienda (GMVV), durante una OLP en Ciudad Caribia el pasado 30 de junio. De la vivienda también se incautó: “un fusil de asalto AK47, un facsímil de fusil M4, varias municiones, una granada, mapas y equipos informáticos”
Durante la operación de desmantelamiento de la banda que lideraba “Gringo”, resultaron abatidos “seis de sus integrantes”. La banda se dedicaban al sicariato, extorsión, secuestro y el tráfico de drogas.
“Durante el enfrentamiento resultaron abatidas seis personas de la banda paramilitar, mientras que otras siete fueron aprehendidos tras incautársele armas de fuego”, señaló el ministro.
De igual manera, González López aseguró que Holt se dedicaba a planificar y ejecutar atentados contra representantes del chavismo, y lo vinculó con la muerte del dirigente del Psuv Omar Molina.
También acusó a Carlos Ocariz, alcalde del municipio Sucre, y a los Estados Unidos de asentar bandas paramilitares en el país.
“Bandas paramilitares que han tomado terreno en el país cuentan con el auspicio de sectores opositores y se inscriben en la guerra no convencional que se mantiene para acabar con la Revolución Bolivariana y para atacar a sus líderes”, aseveró el ministro.