Argentina creó un exitoso emprendimiento desde cero en EE.UU. y ahora triunfa en Broadway
Con tan solo 18 años y una mezcla de emociones, la joven argentina se encontró en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, sujetando sus valijas con fuerza, las que guardaban los recuerdos de una vida entera.
Llena de expectativas, emprendió una nueva aventura a miles de kilómetros de su hogar. Lo que no se imaginaba era que años después la vida la iba a sorprender.
“Emigrar cambió mi vida por completo, tuve la oportunidad de cumplir mis metas y dedicarme a lo que me apasionaba”, cuenta Valentina Berger en una entrevista con Clarín.
La mujer de 34 años – oriunda de la Provincia de Buenos Aires – se dispuso a migrar a Estados Unidos en 2008, con la intención de iniciar su trayectoria profesional en el epicentro del entretenimiento.
De Capital Federal a La Gran Manzana, sin escalas.
La protagonista de esta historia nació en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde construyó recuerdos muy valiosos. Desde pequeña, se vio identificada con el arte, un rubro en el cual encontró su mayor pasión: el teatro.
Por este motivo, a sus 18 años, realizó un intercambio estudiantil en el exterior. Sin pensarlo dos veces, optó por formarse en la ciudad de Nueva York, en Estados Unidos, un lugar caracterizado por resaltar en el mundo del espectáculo.
“Desde pequeña, deseé profesionalizarme en el extranjero. Tuve el privilegio de asistir a un colegio donde fomentaban intercambios culturales, por ende, cuando terminé la escuela secundaria aproveché la oportunidad”, menciona la argentina.
Por ende, en 2008, tomó la decisión de emigrar a el país de las oportunidades, con el objetivo de iniciar sus estudios en Marketing y Administración de Arte en la reconocida Universidad de Nueva York, más conocida como “NYU”.
Al llegar, fue contratada como pasante en una reconocida agencia de prensa, dedicada a realizar publicaciones diarias y periódicas de las obras más importantes de la calle Broadway, donde se producen los musicales más celebres del mundo.
Al año siguiente, cambió de rumbo y consiguió empleo en una renombrada productora, enfocada en el desarrollo y la filmación de producciones artísticas tales como “Harry Potter” y “Mamma Mía”.
Durante el día, trabajaba muchísimo y por las noches, estudiaba. Valentina soñaba en grande. Por este motivo, al finalizar los estudios superiores, puso manos a la obra para volver realidad su sueño.
“La experiencia profesional fue muy enriquecedora, aprendí de los mejores. Gracias a ello, elegí quedarme en el país, con el fin de fundar mi propia empresa dedicada a la formación de artistas para que más argentinos puedan tener acceso a Broadway”, explica con alegría la joven.