Aramco y ExxonMobil cuestionan estrategia de transición hacia energías limpias
Las gigantes petroleras Saudi Aramco y ExxonMobil señalaron que observan dificultades en la estrategia de transición hacia energías limpias, en el marco de la cual su industria es considerada «enemiga», aunque no se la logra sustituir.
«En el mundo real, la actual estrategia de transición está fracasando visiblemente», dijo el director ejecutivo del grupo estatal saudí, Amin Nasser, durante una presentación en el foro de energía CERAWeek by S&P Global en Houston, Texas.
Recordó que el año pasado el consumo mundial de energía aún se basaba en un 82% en combustibles fósiles, según un informe de KPMG. Además, la demanda de petróleo alcanzará niveles récord este año, según proyecciones de la Agencia Internacional de Energía (AIE).
«Este no es el futuro que algunos habían anunciado», consideró Nasser, y creyó poco probable que el petróleo y el gas desaparezcan del suministro hacia el 2050.
«Las alternativas [como la solar o la eólica] no han podido desplazar a los hidrocarburos a escala», sostuvo.
Contribución de las energías limpias
Nasser opinó que, pese al «papel protagónico» de la industria en la «prosperidad global», se les presenta como «un archienemigo de las transiciones».
«Uno de los desafíos aquí es que, si bien la sociedad quiere que se reduzcan las emisiones, nadie quiere pagar por ello», comentó por su parte el director ejecutivo de la estadounidense ExxonMobil, Darren Woods.
Para Nasser, «a pesar de la contribución de las energías alternativas a la reducción de emisiones, cuando el mundo se centra en reducir las emisiones de los combustibles fósiles, obtiene mejores resultados».
El jefe de Saudi Aramco puso como ejemplo la transición en Estados Unidos del carbón al gas natural.
«Mi propuesta es la siguiente: debemos dejar de lado la fantasía del fin del petróleo y el gas», argumentó Nasser. En cambio, el mundo debería «invertir adecuadamente, para reflejar estimaciones realistas de la demanda», agregó.