+600 personas aguardan bajo el sol en tremenda cola para comprar
La indignación se apodera de una mujer que parte con las manos vacías tras esperar cinco horas en tremenda cola en un supermercado para comprar pollo sin conseguirlo. La escasez, que agobia a los venezolanos desde hace más de un año, se acentúa en el interior del país.
Café, aceite, harina de maíz, jabón, detergente… En Valencia, una ciudad industrial al oeste de Caracas, tienen plantas de producción importantes empresas de alimentos y otros bienes, pero la lista de los productos más escasos y codiciados es larga.
El pollo es una de las joyas de la corona desde hace varios meses. Por eso es mayor la frustración de Lileana Díaz, recepcionista de la emergencia del hospital de Valencia, de 49 años.
Los venezolanos recorren supermercados y tiendas para abastecerse de productos básicos.
“Llegué a las cinco y media de la mañana y no he podido comprar nada. ¡No puede ser que uno tenga que trabajar y, además, ponerse a hacer estas colas (filas) para volver con las manos vacías!”, exclama Díaz a la AFP.
Las mujeres como Lileana son mayoría. Una de ellas cuenta que la semana pasada hubo personas que saltaron una verja para adelantarse y no respetar el orden. Dice que la policía tuvo que reprimir para controlar el “zaperoco”. Otra muestra un moretón en su pierna derecha y detalla que se lo hizo en la “lucha” por unos pañales desechables.
En las últimas semanas, las “colas” se han vuelto más largas y tumultuosas, especialmente en ciudades del interior como Maracaibo (oeste), Puerto Ordaz (sur) y Cumaná (este).
La prensa nacional ha reseñado situaciones de tensión y conatos de saqueo en las afueras de los comercios. El pasado 31 de enero se registró un saqueo de dos negocios en San Félix (Bolívar, sur), que dejó un muerto y decenas de detenidos.