Elon Musk anuncia un cobro mensual de $8 para certificar cuentas de Twitter: precio de la suscripción se ajustará según los países
Elon Musk, el nuevo propietario de Twitter, anunció este martes 1 de noviembre en un tuit el próximo lanzamiento de un abono de 8 dólares por mes para aquellos usuarios que deseen certificar la autenticidad de su cuenta y estar menos expuestos a la publicidad.
La red social propone funciones pagas desde el año pasado, pero Musk quiere un programa nuevo, más costoso y más largo para diversificar las fuentes de ingresos de la plataforma.
«El sistema actual de señores y campesinos, con los que tienen la marca azul y los que no, es una mierda. ¡Poder para el pueblo! Azul por 8 dólares al mes», dijo el jefe de Tesla y SpaceX, que se transformó en el nuevo propietario de Twitter el jueves.
El magnate sopesa si fusiona Twitter Blue, que tiene un costo de 5 dólares mensuales para un modo de lectura y herramientas de edición más cómodas, y la posibilidad de que las cuentas elegibles verifiquen y certifiquen su identidad.
Actualmente, solo ciertos perfiles pueden solicitar la marca de autenticidad azul, incluyendo gobiernos, empresas, medios de comunicación, personalidades políticas, culturales o deportivas, entre otros. Y pueden perder su credencial si no respetan las reglas de la plataforma.
El viernes, Musk pidió a los ingenieros de la firma que trabajaran en la revisión del sistema. Dijo que los abonados tendrán otros beneficios: sus tuits aparecerán con prioridad, podrán publicar videos y mensajes de audio más largos y estarán expuestos a «la mitad de la publicidad».
El precio de la suscripción se ajustará según los países. «También traerá ingresos a Twitter para recompensar a los creadores de contenido», concluyó.
Musk, el hombre más rico del mundo, ha repetido desde que se embarcó en la compra de la plataforma que le interesa porque este «lugar público» es imprescindible para la democracia, y para «ayudar a la humanidad».
Indicó que la rentabilidad no era su prioridad. Pero Twitter es una red cuyos ingresos provienen en un 90% de la publicidad y nunca ha sido muy rentable en comparación con sus vecinos californianos Meta (Facebook, Instagram) y Google (YouTube).