“Me pegaba en la cabeza…golpes en el cuello, en las piernas…cuando los demás del mercado escucharon que éramos venezolanos se unieron para golpearnos. Mi novio llevo coñaz…, mi mamá tiene un golpe durísimo, también mi hermana. Cuando me pateaban recuerdo que me intentaban quitar el teléfono”, agregó.
Tras la golpiza, indicó que acudió a la policía para poner la denuncia, pero le pidieron realizarse los exámenes forenses.
Luego de hacerse dichos exámenes volvió a la comisaría, pero esta vez los uniformados le dijeron que tenía que hacer la denuncia ante la Fiscalía porque luego de pasadas 12 horas del incidente ellos no podían hacer nada.
En este sentido, la venezolana denunció que este tipo de actuaciones por parte de la policía alimentan la impunidad en este tipo de casos.
