Régimen de Maduro amenaza con apoderarse de los activos petroleros de Chevron en Venezuela
El régimen de Maduro amenaza con estatizar los activos petroleros de Chevron en Venezuela si Washington declina extender una exención de sanciones que vence el 27 de julio.
La exención emitida como una licencia general por el Departamento del Tesoro de los EE. UU el 28 de enero permitió que Chevron y las compañías de servicios petroleros Halliburton, Schlumberger, Baker Hughes y Weatherford International continuaran algunas operaciones con la petrolera estatal venezolana Pdvsa.
Si la administración de Trump permite que la exención caduque a fines de julio, que obliga a Chevron y a las compañías de servicios petroleros a retirarse, es probable que Nicolás Maduro confisque los activos y les ofrezca a compañías petroleras rusas, chinas y de otros países una “oportunidad para adquirirlos”, dijo a Argus un funcionario del palacio presidencial.
Las “conversaciones discretas” ya comenzaron con la estatal rusa Rosneft y la estatal china CNPC, dijo el funcionario del palacio.
Las afirmaciones fueron confirmadas por un alto funcionario del ministerio de petróleo en Caracas.
Lea también: Según la OPEP, producción de petróleo en Venezuela cayó de nuevo en el mes de junio
Chevron es el principal socio occidental de Pdvsa en Venezuela, luego que sus pares ExxonMobil y ConocoPhillips abandonaron cuando el gobierno estatizó sus activos clave en 2007. Chevron, en común con las compañías petroleras europeas Total y Equinor, aceptó los términos menos favorables del gobierno y se mantuvo como socio minoritario de Pdvsa.
Chevron es accionista con el 30 por ciento en el mejorador de crudos PetroPiar (ex Ameriven) que Pdvsa está actualmente en transición para degradarlo operativamente para utilizarlo para la mezcla de crudo. Chevron también posee una participación de 39,2% en PetroBoscan, que opera el campo de petróleo pesado de Boscan en el estado de Zulia, y una participación de 25,2% en PetroIndependiente, que opera el campo de petróleo medio LL-652 en el lago de Maracaibo. Aún en la etapa inicial de desarrollo se encuentra la empresa conjunta de producción de crudo extrapesado Orinoco de 400,000 b/d Petroindependencia, en la que Chevron tiene una participación de 34%.
Chevron también tiene una participación del 60 por ciento en el campo de gas costa afuera de Loran, que posee 7,3 billones de pies cúbicos de reservas estimadas y forma un solo campo transfronterizo con el campo de Manatee de Trinidad y Tobago, que posee otros 2,7 trillones de pies cúbicos de gas.
En términos de participación, los activos venezolanos son una pequeña parte de la cartera global de Chevron. La extracción diaria neta combinada de Chevron en 2018 de estas cuatro empresas conjuntas promedió 42.000 b/d de crudo y 9 millones de pies cúbicos diarios de gas natural asociado, según la compañía. Pero el potencial de crecimiento futuro es enorme, considerando las abundantes reservas del país y los mercados cercanos. Los activos también posicionarían a Chevron para desempeñar un papel clave en la futura reconstrucción de Venezuela.
Fuentes diplomáticas locales rusas y chinas se negaron a comentar sobre el potencial de adquirir los activos de Chevron. Pero reafirmaron que Rosneft y CNPC mantendrán sus respectivos compromisos a largo plazo para expandir su presencia en la industria petrolera de Venezuela, independientemente de la escalada de las presiones de EE UU para forzar a Maduro a renunciar.
Con información de La Patilla