Un niño de 11 años no quería limpiar su habitación y asesinó a su abuela en Arizona
El sábado pasado Yvonne Woodard y Herbert W. Doyle pasaron el fin de semana en su casa. Estaban tranquilos mirando la televisión, aunque a lo largo del día varias veces le ordenaron a su nieto de 11 años que limpiara su habitación. El niño se negó una y otra vez a seguir las órdenes de sus abuelos. Así lo reseña infobae.com
Una vez más Yvonne le pidió al menor que recogiera su recámara, pero esa fue la última vez que lo hizo. En ese momento el pequeño fue por el arma que guardaba su abuelo y se colocó detrás del sillón donde descansaba la pareja. Segundos después Yvonne recibió un disparo en la nuca.
Herbert corrió en ese instante detrás de su nieto, pero luego titubeó y regresó a ver a su esposa. Mientras la revisaba escuchó un segundo disparo. Cuando volteó observó cómo el niño dió un par de pasos antes de caer desvanecido.
La noticia conmocionó a la ciudad de Lichtfield, en el condado de Maricopa, situada en Arizona, Estados Unidos.
Las autoridades del Litchfield Elementary School District, escuela donde estudiaba el niño, emitieron un comunicado donde lamentaron el hecho y mencionaron que van a proporcionar ayuda psicológica a todos los estudiantes del plantel que así lo requieran.
“Estamos desconsolados al enterarnos de la trágica muerte de uno de nuestros estudiantes y su abuela. Eran miembros valiosos de nuestra familia Wildcat, en Western, y serán profundamente extrañados. Estamos brindando apoyo a nuestros estudiantes y al personal que en estos momentos está procesando la devastadora noticia”, escribió la institución.
Las autoridades del condado de Maricopa dijeron que aún estaban investigando, pero que hasta el momento no habían encontrado indicios para afirmar que el niño tenía predisposición a cometer actos violentos.
Hasta el momento la policía no ha revelado el nombre del pequeño ni el tipo de arma que usó para asesinar a su abuela y después suicidarse. El oficial del condado, Joaquin Enriquez, confirmó que la pareja tenía la custodia del menor.
“Eran una buena familia. El niño solía andar en bicicleta y jugar en el vecindario” mencionó uno de los vecinos durante una entrevista a los medios locales.