El perreo contra Maduro: Ricky y Mau Montaner cuentan como la división política ha llegado al reguetón
Ricky y Mau no solo son los hijos del reconocido artista Ricardo Montaner, sino que su paso por la música ya lleva su sello personal, como la autoría de Sin Pijama, la canción de Becky G y Natti Natasha que rompió récords.
A pesar de la fama y el éxito, estos hermanos no pueden escapar de la crisis que sufre Venezuela. Al ser entrevistados por El Confidencial en Madrid, tras triunfar en una fiesta de Coca-Cola en el Palacio de los Deportes, comentan como llevan cinco años sin pisar tierra venezolana. “El problema es que nuestra opinión es demasiado pública. Recibimos demasiadas amenazas de lo que va a pasar si volvemos. Eso no es nada chévere. Conocemos muchos amigos artistas cuyo principal público está en Venezuela, pero se han ido a vivir a Estados Unidos. Les llegan ofertas de nuestro país, pero no se atreven a aceptarlas, ya que muchas veces no saben quién las emite ni con qué motivos”, lamentó Ricky.
Durante la conversación, comentan una anécdota que dibuja el éxodo de los jóvenes venezolanos: “En la puerta del hotel hemos encontrado una chica que había llegado justo hoy de Caracas y nos ha pedido un autógrafo. Estaba de paso por Madrid porque va a vivir a Irlanda. Es todo muy triste. Hay que agradecer la acogida de tantos compatriotas por vuestro país. Otros venezolanos no tienen tanto dinero y cruzan la frontera a pie”.
Recuerdan el caso de Nacho, cuando regresó a Venezuela a participar en un acto en 2016 a favor del dirigente de Voluntad Popular Leopoldo López: “Él regreso y le quitaron el pasaporte. Lo pasó muy mal. Nuestro padre, el cantante Ricardo Montaner, también está en una situación parecida, no puede confiar en que vaya a ser respetada su seguridad si regresa”, relató Mau.
En diciembre de 2016 el propio presidente Nicolás Maduro hizo un llamado al dúo Chino y Nacho en cadena nacional: “Vuelvan y sean venezolanos. Si tengo que perdonarlos de algo, los perdono, pero vengan a cantar su musiquita que a la gente le gusta (…) Yo les tengo cariño. Chino y Nacho son víctimas de un proceso de presiones. Les mando un beso. Yo les quiero. Vuelvan a Venezuela, sean venezolanos”.
Ante esto, Nacho volvió a Venezuela en 2017, pero a participar en una marcha opositora.
“Poco ha poco, ambos bandos políticos ese han dado cuenta de la potencia y tirón popular del género. Maduro sigue intentando seducir a los reguetoneros, por ejemplo con el gesto de bailar este ritmo en el inicio de su última campaña electoral.A pesar de todo, parece claro que la derecha opositora va en cabeza de la carrera por ganarse las simpatías de las estrellas del ‘perreo’”, dice El Confidencial en su nota.