EE.UU. reconoce que Estado Islámico es más peligroso que Al Qaida
La fiscal general de EE.UU., Loretta Lynch, ha asegurado que la «amenaza del Estado Islámico (EI) es igual de seria, si no más, que Al Qaida», al subrayar la «peligrosidad» que supone para la seguridad del país su «diferente modelo» de terrorismo.
«Es una amenaza igual de seria, si no más, que la de Al Qaida», indicó Lynch en una entrevista en la cadena ABC, en la que remarcó que se trata de «un modelo diferente de otro tipo de grupos terroristas».
«Creo que el hecho de que todavía sea nuevo para nosotros y estemos todavía tratando de determinar realmente su alcance, lo convierte en un muy, muy peligroso», dijo Lynch sobre las actividades del EI fuera de Oriente Medio.
Para la fiscal general, que tomó posesión de su cargo a comienzos de año, uno de los grandes motivos de preocupación es la habilidad y efectividad de EI en las redes sociales.
«Tienen cerca de 20.000 seguidores en inglés en Twitter. El EI se centra en conseguir que individuos lleven a cabo actos de violencia en su nombre, y luego se apuntan su responsabilidad», afirmó Lynch. Por ello, agregó, es «mucho más difícil predecir» sus siguientes pasos.
Las autoridades de seguridad de EE.UU. están cada vez más preocupadas con el «terrorismo doméstico» llevado a cabo por los considerados «lobos solitarios», individuos en territorio estadounidense que lanzan atentados sin conexión explícita con EI pero siguiendo alguno de sus predicamentos.
La reciente matanza de Chattanooga (Tennessee), hace dos semanas, en la que el kuwaití nacionalizado estadounidense Mohammad Youssef Abdulazeez de 24 años, mató a cinco infantes de marina (marines) ha vuelto a elevar la voz de alarma sobre este tipo de acciones.
El Buró Federal de Investigación (FBI) intenta determinar los motivos que llevaron a Abdulazeez a realizar este tiroteo, que está siendo investigado como «un acto terrorista» hasta que las pruebas no señalen lo contrario.
Los investigadores examinan un viaje de Abdulazeez a Jordania el año pasado, por la sospecha de que pudiera haberse radicalizado o incluso haber recibido órdenes de grupos yihadistas.
Vía ABC