Mireddys González demanda a Daddy Yankee y exige multa millonaria
La batalla legal entre el icónico cantante puertorriqueño Daddy Yankee y su exesposa Mireddys González, con quien estuvo casado casi 30 años y tiene dos hijos, ha escalado a un nuevo nivel y parece una novela venezolana de aquellas de los 80 con más de 200 capítulos.
González solicitó formalmente al Tribunal de San Juan que se declare a Ramón Luis Ayala Rodríguez, nombre real del artista, en desacato civil y que se le imponga una multa diaria de 5.000 dólares por no cumplir con una serie de requerimientos vinculados a las corporaciones El Cartel Records y Los Cangris Inc.
Según el documento presentado por González, Daddy Yankee no ha cumplido con la sentencia emitida en diciembre de 2024, que le otorgó la presidencia de ambas entidades y estableció que cualquier desembolso mayor a 100.000 dólares debía contar con la autorización de ambas partes.
Además, el cantante se comprometió a rendir informes mensuales sobre las actividades financieras de las empresas. Sin embargo, Mireddys denunció que no se presentaron los informes correspondientes a enero, febrero, marzo ni abril de 2025, y que el único documento entregado el 10 de abril contenía información “incompleta, ambigua y/o vaga” que impide conocer el estado real de las corporaciones.
a exesposa también acusó a Daddy Yankee de disolver unilateralmente El Cartel Records Inc. el 23 de abril sin su consentimiento ni la división adecuada de los bienes societarios. Además, denunció que el cantante solicitó a la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos que las marcas ‘Daddy Yankee’ y ‘DY’ pasaran a estar registradas a su nombre, lo que podría afectar la propiedad compartida de los activos.
El juez Anthony Cuevas otorgó al artista un plazo final de diez días para cumplir con las órdenes judiciales, luego de que los abogados de Daddy Yankee solicitaran inicialmente veinte días para responder a las alegaciones. La disputa se intensifica tras el divorcio oficial de la pareja en febrero de 2025 y la controversia por movimientos millonarios en las cuentas corporativas sin autorización mutua.