Migrantes iniciaron huelga de hambre para solicitar protección a Biden antes de que llegue Trump
Una decena de personas migrantes beneficiarias del Estatus de Protección Temporal (TPS) en Estados Unidos iniciaron este lunes una huelga de hambre en Washington para pedir al presidente, Joe Biden, que las proteja antes de la llegada el próximo enero del republicano Donald Trump, quien ha prometido deportaciones masivas.
Miembros de la organización Alianza Nacional TPS (National TPS Alliance, en inglés) dieron comienzo a esta acción con la que quieren que Biden les conceda una extensión de su TPS que les permitiría residir en el país legalmente durante 18 meses más y complicaría que Trump les pudiese deportar.
El TPS, un permiso que se otorga a personas provenientes de países en crisis y con el que millones de migrantes han podido permanecer en el país durante años, se encuentra amenazado por la llegada a la Casa Blanca de Trump, porque aunque no ha especificado cómo va aplicar su plan, ha prometido mano dura en materia migratoria.
Donis Hernández, originario de El Salvador, es una de las personas que se unió a la huelga para exigir esta renovación. Su permiso caduca el 9 de marzo y teme que si no consigue renovarlo durante el mandato de Biden tampoco pueda hacerlo después.
“El miedo más grande que tenemos es que va a haber familias separadas. Llevo más de 20 años aquí y en mi familia hay personas que se podrían quedar y otras que no”, explicó a EFE.
Como él, Neida Mejía, nacida en Honduras y beneficiaria del TPS desde hace más de dos décadas, tiene permiso hasta el próximo julio y teme que si la deportan no pueda ver más a sus nietos.
“Tengo miedo de que nos separen, ellos han nacido aquí y tienen permiso para quedarse”, aseguró muy emocionada.
Esta huelga, organizada por la National TPS Alliance está dentro de la semana de acción contra las deportaciones que ha convocado el Movimiento por una Reforma Migratoria Justa (FIRM, por sus siglas en inglés) coincidiendo con el día internacional del migrante, que se celebra el miércoles 18.
“Conocemos las amenazas que se avecinan con la Administración de Trump”, dijo en una llamada con periodistas Jose Palma, coordinador de la Alianza. “La huelga de hambre es para meter presión y exigir a Biden a que tome medidas antes de Navidad”.
Los huelguistas recuerdan que gracias a la lucha y a acciones como estas ya consiguieron permanecer en el país durante el primer mandato de Trump (2017-2021).
“Su anterior llegada al poder fue un desastre para nosotros porque el TPS fue cancelado. Tuvimos que lucharlo en las cortes y al final conseguimos quedarnos gracias a ganar extensión a extensión”, contó Soledad Miranda, una salvadoreña que lleva más de 30 años en el país.
Además de pedir una nueva extensión, la mujer reprocha a Biden que “prometiese que iba a trabajar durante sus primeros cien días sobre la inmigración” y que casi al final de su mandato su situación, como la de tantos otros, siga sin regularizarse.
“Pagamos impuestos aquí, creo que es justo que después de todos estos años tengamos ya una residencia, pero ahora no tenemos ni residencia ni extensión”, lamentó.
Pese a que la huelga ha iniciado con 11 personas, esperan que puedan llegar a ser hasta 25 llegados de todas partes del país.
Los migrantes en huelga permanecen en una iglesia metodista cercana al Tribunal Supremo del país, tienen provisiones de agua e isotónico y se someterán regularmente a pruebas de tensión para comprobar que se encuentran bien.
Vía lapatilla