Los mitos sobre la Isla de las Muñecas, el quinto lugar más embrujado del mundo
En lo profundo de los canales de Xochimilco, al sur de la Ciudad de México, se esconde un sitio que acaba de ser nombrado uno de los “más embrujados del planeta”. La Isla de las Muñecas, adornada por miles de muñecas desgastadas y rotas que cuelgan de los árboles, capturó la curiosidad mundial al alcanzar el puesto número 5 en una lista global de sitios paranormales. Este reconocimiento la coloca junto a otros lugares icónicos de misterio y terror, consolidando su estatus como un destino para los amantes de lo macabro y lo inexplicable.
La inclusión de esta isla en el top 5 subraya la fascinación que genera su inquietante atmósfera, así como las leyendas que giran en torno a su origen. Visitantes de todo el mundo se acercan cada año a conocer el peculiar sitio, atraídos por las historias de fantasmas y los mitos de fenómenos sobrenaturales que rodean a este extraño rincón mexicano.
Entre los otros lugares que comparten esta inquietante distinción, publicada en el prestigioso medio británico Time Out, se encuentran el Cementerio de la Recoleta en Argentina, que encabeza la lista gracias a sus historias de fantasmas y mausoleos históricos; el Fuerte de Bhangarh en India, famoso por las leyendas de maldiciones que rodean sus antiguas ruinas; la Casa de Lizzie Borden en Estados Unidos, donde ocurrieron infames asesinatos que aún intrigan a los visitantes; y Poveglia, una isla en Italia conocida por su oscuro pasado como sitio de aislamiento para pacientes de peste y manicomio.
La Isla de las Muñecas está ubicada en los canales de Xochimilco, una red de vías fluviales que forman parte de la Ciudad de México. Este sitio es famoso por sus trajineras y chinampas, vestigios de la antigua técnica agrícola mesoamericana. La isla se encuentra al sureste del Embarcadero de Cuemanco, en una de las áreas más tranquilas y menos urbanizadas de la zona. Para llegar a este rincón apartado, los visitantes deben realizar un viaje en trajinera, lo que añade un elemento extra de aventura y aislamiento al recorrido.
La Isla de las Muñecas, además de ser un destino turístico peculiar, es un lugar cargado de historias llenas de misterio, tragedia y leyendas que atraparon la imaginación de los visitantes. Todo comenzó en la década de 1950, cuando Julián Santana Barrera, un hombre originario del barrio de La Asunción en Xochimilco, decidió mudarse a esta pequeña isla para vivir en aislamiento. Lo que parecía ser una vida tranquila y sencilla, pronto se transformó en una experiencia aterradora marcada por sucesos paranormales.
Según el mito más difundido, Santana encontró el cuerpo de una niña ahogada en las aguas que rodeaban su isla. La versión más popular de la historia cuenta que la niña se había enredado en los lirios acuáticos y, pese a los intentos de sobrevivir, terminó muriendo en el lugar. A partir de este momento, Julián empezó a escuchar voces, lamentos y pasos en su entorno. Aterrorizado por lo que interpretaba como la presencia del espíritu de la niña, comenzó a buscar formas de calmarla. Fue entonces cuando tuvo la idea de colgar muñecas en los árboles de la isla.