Más de 40 muertos por tiroteo en un teatro de Moscú: sujetos dispararon con armas de asalto (+Videos)

Un trágico suceso ocurrió este viernes 22 de marzo en el Crocus City Hall, una sala de conciertos ubicada en Krasnogorsk, a las afueras de Moscú, capital de Rusia. Según informes preliminares, una explosión seguida de un tiroteo dejó un saldo de al menos 40 personas fallecidas y más de 100 heridas, con aproximadamente 20 hospitalizadas, cinco de ellas en estado grave.

Testimonios y videos compartidos en redes sociales muestran escenas caóticas de personas que asistían a un concierto del grupo Piknik, huyendo del recinto mientras una densa nube de humo negro se elevaba y se reportaba el derrumbe parcial del techo.

Imágenes también muestran a individuos armados, vestidos con prendas de camuflaje, disparando indiscriminadamente dentro del recinto y dejando cuerpos en el suelo entre charcos de sangre.

A pesar de los reportes, los servicios de emergencia aún no han confirmado si hay más atacantes involucrados, aunque se considera la posibilidad de hasta cinco tiradores. La agencia RT informó sobre posibles atacantes atrincherados dentro del lugar, mientras las fuerzas de seguridad continúan la búsqueda de los perpetradores.

Dave Primov, presente en la sala, comentó a Kommersant: “Faltaban literalmente 10 minutos para el inicio del concierto, el 70% de toda la sala Crocus ya estaba reunida y escuchamos lo que pensé que eran fuegos artificiales, en el lado izquierdo, en algún lugar fuera del pasillo. Vimos cómo una multitud de personas de abajo empezaban a moverse como ríos y, entonces, nos dimos cuenta de que algo andaba mal. La gente empezó a gritar,  a correr y empezaron los disparos, sólo ráfagas de ametralladora. Dispararon directamente a la multitud contra la gente”.

Las labores de evacuación y evaluación del edificio están en curso, con aproximadamente 100 personas evacuadas por el subsuelo y otras siendo rescatadas desde el techo con equipos especializados. Se desplegaron numerosos recursos de emergencia, incluyendo efectivos de la Guardia Nacional, antidisturbios, bomberos y ambulancias.

Las autoridades locales, incluyendo al gobernador Andréi Vorobiov y el alcalde Sergei Sobyanin, expresaron sus condolencias a las familias de las víctimas y prometieron proporcionar toda la asistencia necesaria. Mientras tanto, la Dirección General de Investigación del Comité de la Federación Rusa abrió una investigación penal por actos terroristas.

Aunque no se ha reclamado la autoría del ataque, se suspendieron todas las actividades masivas en la capital y se aumentaron las medidas de seguridad en los aeropuertos locales. Además, la Legión de la Libertad de Rusia negó cualquier implicación en el incidente, mientras que altos funcionarios rusos advierten posibles represalias contra Kiev si se demuestra su participación.

con información de Infobae

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