Revelan cómo huyó el peligroso delincuente venezolano alias Maracucho, líder de la banda criminal Satanás que opera en Colombia
Autoridades de Colombia y Estados Unidos se encontraban tras el rastro de Aderbiss Segundo Pirela Pirela, un peligroso criminal venezolano, conocido bajo el alias de «Maracucho» o «Pedrito». De hecho, su nombre figura en investigaciones que lo apuntan como el segundo cabecilla de la banda de crimen organizado «Satanás».
Según funcionarios policiales colombianos, el accionar delictivo del hombre comenzó desde el año 2017, luego de que se le impusiera una orden de captura en Venezuela por violencia intrafamiliar y extorsión. Así mismo, en 2019, se le agregó otra solicitud judicial.
Se pudo saber que «Maracucho» habría llegado a Colombia al menos tres años atrás y habría utilizado su experiencia delictiva para sembrar temor en los comerciantes de la capital.
Aparentemente, el 2 de noviembre de 2023, habría asumido el control de la peligrosa banda «Satanás», tras la captura de José Manuel Vera, principal cabecilla de esa organización. Sin embargo, ya en 2022, existía una orden de captura en su contra, por los delitos de concierto para delinquir y tráfico de estupefacientes.
De acuerdo con El Tiempo, Pirela Pirela también carga sobre sus hombros una orden de captura por el asesinato de un ciudadanos el pasado 15 de octubre de 2023. Aparentemente, «Maracucho» habría enfrentado al hombre y, luego, le habría disparado dos veces en la cara.
Es importante mencionar que, durante la mañana de este jueves 14 de marzo, el general José Daniel Gualdrón, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, dio detalles de cómo fue el plan de huida de alias Maracucho hacia Estados Unidos.
Aparentemente, luego de asumir el control de la agrupación criminal, el hombre se habría trasladado hasta el Urabá antioqueño, para buscar salidas del país, por medio del Tapón del Darién.
A través de Facebook, circuló una foto del venezolano llegando a México para luego presentarse en un puesto de control migratorio y así hacer el registro. En ese punto, solicitó asilo político y permaneció varios días en un albergue de migrantes, pero no había dejado sus actividades en el grupo delictivo. De hecho, su rastro en el camino fue esencial para el seguimiento y posterior captura del hombre en Texas.
Con información de El Tiempo