Alejandro Sanz es condenado a pagar más de tres millones de dólares en deudas por EEUU
Alejandro Sanz ha sufrido un duro varapalo judicial en medio del delicado momento personal que atraviesa. El cantante, que ha roto con Rachel Valdés y ha confesado públicamente el bache emocional en el que se encuentra, ha sido condenado a pagar una ingente cantidad por las millonarias deudas que acumula en Estados Unidos, una sentencia que complica aún más su situación económica, así lo reseñó INFOBAE.
El juzgado de primera instancia número 47 de Madrid ha condenado al artista a pagar 3.275.000 dólares, unos 2,9 millones de euros, por no hacerse cargo de los préstamos bancarios que pidió a Total Bank en Florida para adquirir dos propiedades en Estados Unidos, según adelanta El Mundo.
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En concreto, esta sentencia viene a ratificar el dictamen que ya emitió hace dos años la Corte de Miami, cuando el cantautor ya fue condenado por estos impagos de las hipotecas con las que se hizo con dos propiedades por valor de unos siete millones de dólares. Además de la multa por no hacerse cargo de estas deudas, la Justicia prepara también el embargo de varias propiedades de Sanz si no hace frente a la cantidad exigida.
El calvario legal de Alejandro Sanz
El inicio de los problemas económicos y legales de Alejandro Sanz se produce cuando el cantante de Corazón partío dejó de pagar las cuotas de sendos préstamos que la entidad Total Bank de Florida había otorgado a Gazul Producciones S.L.U. y a Music on Wheels LLC, dos de las sociedades que forman parte del entramado empresarial del artista español.
Como aval de esos préstamos, Sanz empleó otra de sus empresas, Alja Productions LLC, y su finca de Miami. A su vez, la entidad financiera cedió la deuda del cantante al fondo de inversión americano SHEDDF2, que tras varios intentos de negociación con el cantante inició en noviembre de 2019 un proceso de ejecución hipotecaria para hacerse con las propiedades impagadas y ponerlas a la venta. Después de que las sociedades del artista no respondieran a la demanda, la Corte de Miami-Dade declaró en rebeldía a las empresas denunciadas.
En febrero de 2020, después de que Alejandro Sanz despidiera a su asesor por mala gestión, los abogados del cantante firmaron un acuerdo con el mencionado fondo de inversión para cederle los inmuebles y liquidar sus deudas a través de la venta de los mismos. Sin embargo, surgió un nuevo conflicto por el precio de las propiedades.
Según la información de El Mundo, el artista quiso sacar a la venta esas dos propiedades por 14 millones de dólares, el doble de lo que le costó adquirirlas. Ese elevado precio y la documentación incompleta aportada por el cantante impidieron la venta, por lo que se prosiguió entonces con la ejecución hipotecaria para hacer frente a la deuda que, tal y como se estableció judicialmente en septiembre de 2020, ascendía a 11.951.895 dólares.
Finalmente, el fondo de inversión consiguió vender las propiedades por 9.475.367 dólares, por lo que Sanz todavía tenía pendientes casi 2,5 millones de dólares de deuda. Sin embargo, la defensa del compositor denunció que la venta se había llevado a cabo por un precio inferior al valor de mercado, pero una vez más la justicia americana le dio la espalda al cantante y dictaminó que el precio de la transacción era razonable.
Es entonces cuando el fondo de inversión americano solicita a la justicia española que reconozca la validez de la sentencia de la Corte de Miami para que el cantante haga frente a la deuda con sus bienes en España, una cantidad a la que se suman las costas del procedimiento.
De no abonar en un breve período de tiempo esos casi tres millones de euros, Alejandro Sanz se podría enfrentar al embargo de varias de sus marcas registradas, participaciones en varias de sus empresas y de dos de sus propiedades inmobiliarias en España: la finca de Jarandilla de la Vera, en Cáceres, y la casa de Cádiz. Para intentar evitarlo, el artista ha puesto en venta su vivienda en la provincia extremeña por un precio que ronda los tres millones de euros, según ha adelantado ABC.