Capriles habla tras la persecución del gobierno a Guaidó: “Ningún venezolano debería ser presionado a abandonar su país”

El exgobernador del estado Miranda Henrique Capriles Radonski expresó su solidaridad con el expresidente interino Juan Guaidó, quien dejó el país el lunes y después fue expulsado de Colombia, donde se había trasladado para asistir a la conferencia internacional sobre Venezuela, que se celebra este martes 25 de abril en Bogotá. 

“Nuestra solidaridad con @jguaido, su esposa, sus pequeñas hijas, familiares y miembros de su equipo. Ningún venezolano debería ser presionado a abandonar su país. Nuestro compromiso es con la posibilidad de que todos los venezolanos podamos vivir en paz en nuestra tierra”, escribió en su cuenta en la red social Twitter.

En ese sentido, el dirigente político aseguró que se debe trabajar “unidos para que las iniciativas de diálogo y entendimiento tengan éxito en el rescate de la democracia, la tolerancia y el cese del sufrimiento de los venezolanos”.

Nuestra solidaridad con @jguaido, su esposa, sus pequeñas hijas, familiares y miembros de su equipo.

Ningún venezolano debería ser presionado a abandonar su país. Nuestro compromiso es con la posibilidad de que todos los venezolanos podamos vivir en paz en nuestra tierra.…

— Henrique Capriles R. (@hcapriles) April 25, 2023

A través de un comunicado publicado en redes sociales, Guaidó aseguró que adoptó esa decisión “a pesar del riesgo que implica salir nuevamente a buscar apoyo del mundo para los venezolanos”.

Recientemente, circulaban rumores que señalaban sobre un presunto asilo de Guaidó en una embajada en Caracas, con la intención de evitar su arresto.

“En los últimos días, el régimen nuevamente ha elevado las amenazas en mi contra y su objetivo es callar mi voz. Yo no voy a permitirle eso a Maduro”, añadió el expresidente de la Asamblea Nacional electa en 2015.

Además, enfatizó que espera que esa conferencia en Bogotá “pueda garantizar que el régimen de Maduro regrese a la mesa de negociaciones en México y se acuerde un cronograma creíble para unas elecciones libres y justas como solución al conflicto”.

Concluyó en que su único objetivo será el de garantizar el voto de los venezolanos en el exterior, para que estos puedan participar en las elecciones primarias de la oposición y en las elecciones presidenciales de 2024.

No está “invitado”

Cabe destacar que el Ministerio de Exterior de Colombia aclaró este lunes que Guaidó no está invitado a la cumbre sobre Venezuela organizada por el presidente de ese país, Gustavo Petro.

“El canciller Álvaro Leyva Durán no ha invitado a este espacio al señor Juan Guaidó, por lo cual no se cuenta con su asistencia a la conferencia”, cita el comunicado emitido por ese gabinete.

Al evento irán representantes de más de 15 países, entre ellos Estados Unidos, Canadá, México, Brasil, Ecuador, Argentina, España, Alemania y Francia.

Expulsión de Colombia

Guaidó tuvo que dejar Colombia con dirección a Estados Unidos la mañana de este martes, después de que se le informara que no se encontraba invitado a la conferencia y recibiera amenazas del canciller Leyva.

“Si no aparece, corre riesgos porque entró de forma inapropiada y en Colombia cumplimos la ley”, indicó el canciller de Colombia.

Posteriormente, el expresidente encargado fue conducido por Migración Colombia al aeropuerto de El Dorado, Miami, y afirmaron que él mismo había comprado el tiquete hacia los Estados Unidos.

Ya en los Estados Unidos, Guaidó condenó la actitud del gobierno del presidente Petro, y aseveró que su iniciativa de diálogo carece de coherencia, dado que él ya se ha puesto del lado de la “dictadura”. Sin dar mayores detalles, señaló que teme por su familia y equipo de trabajo, quienes se encuentran en su mayoría en Caracas.

“Tengo 70 horas o más de viaje. Estoy muy preocupado por mi familia y por mi equipo de trabajo, que ya han visto las consecuencias de una dictadura, torturados, perseguidos y en este momento amenazado directamente”, fueron las primeras declaraciones que dio en Estados Unidos a un grupo de periodistas.