Asfixió a su esposo con sus nalgas y ahora enfrenta cargos por homicidio (+Detalles)
Una mujer que pesa algo más de 100 kilos (224 libras) se enfrenta a la justicia de Rusia tras matar a su marido con sus nalgas, al sentarse sobre su cara y asfixiarlo en forma intencional, según un informe que publicó el diario NYPost, reseñado por El Clarín.
La discusión entre la pareja terminó en violencia tras el excesivo consumo de alcohol.
Tatyana O., una mujer rusa de 45 años, ahora enfrenta cargos por homicidio. De acuerdo con la información publicada por los medios de la localidad de Novokuznetsk, cerca de la frontera con Mongolia, la hija de Aidar, el hombre fallecido, vio a su padre inmovilizado boca abajo en la cama, y decidió salir corriendo para buscar ayuda.
Un tiempo más tarde, Tatyana indicó que buscó la forma de “calmarlo” después de que su pareja había estado bebiendo. Sin embargo, cuando la ambulancia llegó al lugar, el hombre ya estaba muerto.
Tras esto, el cuerpo del hombre fue sometido a una autopsia, la cual arrojó que falleció a causa de “asfixia por bloqueo del sistema respiratorio”.
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Las investigaciones iniciales indican que el marido de Tatyana quedó boca abajo con la cara encajada en el colchón, con su esposa sentada sobre su cuello mientras “usaba sus piernas para que no pudiera levantarlo”, según marca el NYPost.
Durante la realización de un primer juicio, la justicia local retiró el cargo de asesinato y Tatyana fue condenada por causar la muerte por negligencia. El tribunal marcó que la mujer no tuvo la intención de causar la muerte de su marido.
Fue condenada a 18 meses de trabajos comunitarios y a pagar 2.800 dólares en concepto de “daños morales”, informó Life. Sin embargo, esta semana el Comité de Investigación anunció que va a presentar una nueva acusación de asesinato contra Tatyana, según publicó el diario británico The Sun.
Al parecer y según la nueva acusación, la mujer se había enojado “después de haber bebido mucho” y “en cuanto el hombre se tumbó en la cama, enterrando la cara en el colchón, se sentó sobre su cuello, mientras le sujetaba la cabeza con las piernas para que no pudiera levantarla”.
Después de que el hombre dejara de dar señales de vida, “la acusada, asustada, le sacudió y le gritó para que se despertara”, se afirmó.
Con información de Caraota Digital