La estrategia judicial de Trump para impugnar las elecciones

La estrategia judicial de Donald Trump para impugnar los resultados electorales en su país registraron una serie de reveses en tres estados claves que le dieron la victoria a su oponente Joe Biden.

Se trata de Pensilvania, Arizona y Michigan, todos favorecieron a Biden, incluso, según la secretaria de Estado, Kathy Boockvar, la ventaja del demócrata es tal que no será necesario un recuento.

Boockvar emitió un comunicado para explicar que no se llevará a cabo el recuento porque ningún candidato fue derrotado por medio punto porcentual o menos, que es lo necesario para llevar adelante este proceso, pues por el momento hay un 98% de los votos escrutados y Biden obtuvo la delantera por un 0,87% de los votos, es decir, 60.000 boletas, un número que podría seguir aumentando.

«Estamos extremadamente agradecidos a los 67 condados que han estado trabajando horas extra y haciendo un esfuerzo extraordinario para contar todos los votos. Se han contado más de 6,8 millones. Los condados continúan contando aproximadamente 100.000 boletas provisionales entregadas a los votantes el día de las elecciones, así como más de 28.000 boletas entregadas por miembros de las Fuerzas Armadas y otros votantes del exterior», indicó.

Por otro lado, en Michigan, un juez rechazó la solicitud hecha por los republicanos para demorar la oficialización de los resultados en Detroit, la ciudad más grande del estado, donde Biden obtuvo una importante mayoría.

El magistrado del condado de Wayne, Timothy Kenny, calificó como «no creíbles» las acusaciones de los observadores de Trump.

«Detener la certificación del resultado sería un ejercicio de activismo judicial sin precedentes», señaló.

Los observadores de Trump habían asegurado que los trabajadores encargados del conteo de votos rompieron las reglas para beneficiar a Biden, entre las faltas que señalaron estaban que las boletas que recibieron luego de la hora límite fueron alteradas y que algunas de las boletas eran emitidas por supuestos electores nacidos en el año 1900.

Sin embargo, en este estado Biden tiene una ventaja de 150.000 votos.

Asimismo, en Arizona, los mismos republicanos desistieron de seguir con sus acciones legales en Maricopa, el condado más grande.

La abogada de la campaña de Trump en ese estado, Kory Langhofer, reconoció que su denuncia no afectaba un número de boletas suficientes como para influir en el resultado de las elecciones.

La denuncia que habían hecho en ese estado señalaba que los trabajadores de las elecciones indicaron a los votantes que apretaran un botón en sus máquinas de votación que generó que miles de boletas no fueran contadas, pero, de acuerdo con la evidencia, solo se pudieron ver afectadas 191 boletas de esta forma y la diferencia a favor de Biden en el estado es de 11.000 votos.

Con información de Infobae.

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