El presidente Donald Trump anunció el martes el final del trato preferencial de Estados Unidos hacia Hong Kong y promulgó un ley que prevé sanciones contra responsables hongkoneses y chinos.
China amenazó este miércoles con represalias y convocó al embajador estadounidense en Pekín, Terry Branstad.
El texto firmado por Trump “es una injerencia flagrante en los asuntos de Hong Kong y los asuntos internos de China y vulnera seriamente las leyes internacionales y las normas básicas de las relaciones internacionales”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores chino en un comunicado.
– “Abusadores de los derechos humanos” –
“El Departamento de Estado va a imponer restricciones de visas contra ciertos empleados de empresas de tecnologías chinas como Huawei que dan apoyo material a regímenes que participan en violaciones de los derechos humanos y abusos”, dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo, en una rueda de prensa.
En un comunicado, el Departamento de Estado advirtió a las empresas de telecomunicaciones del mundo. “Si están haciendo negocios con Huawei, están haciendo negocios con abusadores de los derechos humanos”, sentenció el Departamento.
El secretario de Estado también anunció un viaje a Londres después de que el Reino Unido anunciara que vetará a Huawei del desarrollo de su red 5G.
“Me voy el lunes para un viaje rápido al Reino Unido y a Dinamarca, estoy seguro de que el Partido Comunista Chino y la amenaza que éste supone a los pueblos libres en todo el mundo va a estar entre las prioridades de la agenda”, anunció Pompeo.
El jefe de la diplomacia estadounidense alabó la decisión del primer ministro británico, Boris Johnson, pero negó que esta estuviera derivada de presiones de Washington.
“Yo realmente creo que ellos hicieron esto porque su equipo de seguridad llegó a la misma conclusión que nosotros”, afirmó.
El asesor de Seguridad Nacional estadounidense, Robert O’Brien, habló de Huawei en conversaciones con sus homólogos europeos en París, advirtiendo sobre el peligro de que la compañía pueda espiar secretos de los gobiernos y recolectar grandes cantidades de datos personales.
“Europa está despertando ante la amenaza de China”, dijo O’Brien a la prensa. “Imaginen cómo un país como China podría interferir en las elecciones si lo supiera todo sobre cada persona en la Tierra”, añadió.
La relación entre Washington y Pekín pasa por un momento de gran crispación. Además de la ley en Hong Kong, Estados Unidos ha recriminado a China la falta de transparencia con la que gestionó la aparición del nuevo coronavirus en la localidad de Wuhan.
La semana pasada, Pompeo ya anunció que Estados Unidos iba a rechazar la solicitud de visado a tres altos funcionarios de Pekín como castigo por el trato que reciben en China los uigures y otros musulmanes turcos en la región occidental de Xinjiang.
Y el lunes, el jefe de la diplomacia estadounidense juzgó “ilegales” las reivindicaciones de Pekín en el mar de China Meridional.
Críticos de Trump en su país y en el extranjero lo acusan de utilizar a China para desviar la atención de su propio manejo de la pandemia de coronavirus, en un momento en que Estados Unidos es el país del mundo con más fallecidos y más casos de Covid-19.
Con información de La Patilla.