Esta empresa de EE.UU. quebró por deuda de siete millones de dólares

Foto: Archivo.

La empresa estadounidense Chesapeake Energy, encargada de la facturación hidráulica especializada en el petróleo de esquisto, se ha declarado en Bancarrota, en sustento al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.

De acuerdo con la información publicada por la agencia rusa de noticias Sputnik, la compañía manifestó, a través de un comunicado, que «ha solicitado voluntariamente la protección del Capítulo 11 (de la ley de bancarrota) en el Tribunal de Bancarrotas de Estados Unidos para el Distrito Sur de Texas para facilitar una reestructuración integral del balance».

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En este sentido, Chesapeake, industria fundada en 1989, ha anunciado que implementará un plan de reorganización para «eliminar aproximadamente 7.000 millones de dólares de deuda».

Agrega la nota que al parecer, la compañía llegó a un acuerdo con los acreedores para obtener una financiación de 925 millones de dólares. Además, los acreedores y titulares de pagarés garantizados concederán a Chesapeake 600 millones de dólares.

Cabe destacar que a finales de mayo, la Agencia Internacional de la Energía ( AIE) alertó en su informe que las inversiones en la industria estadounidense del esquisto disminuirían en un 50% este año 2020, frente al porcentaje registrado en el 2019, como producto de la crisis generada por la pandemia del Covid-19.

Según la AIE, Estados Unidos registra en lo que va de año el mayor recorte de la historia en materia de inversión en el sector energético al reportar más del 25% en comparación con el 2019, a consecuencia del desplome en el gasto que tuvo la industria petrogasística.

Desde su fundación, la empresa Chesapeake Energy se enfocó en la perforación de las zonas subdesarrolladas de Oklahoma y Texas y en lugar de la perforación de pozos verticales, empleó técnicas de perforación lateral para liberar el gas natural de formaciones de esquisto no convencionales.

Al emplear técnicas de extracción de petróleo y gas no convencionales, Chesapeake Energy se convirtió en un líder del «fracking», método que ha afrontado un escrutinio agudo debido a su impacto ambiental.

No obstante, en la medida en que dicha empresa iba adquiriendo más terrenos en diferentes estados asumía también una creciente deuda, bajo el compromiso de ser subsanada en los próximos años.

Con información de AVN

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