Abuelito venezolano se lanzó de un puente con la biblia en la mano (+Motivo)

Un adulto mayor venezolano, identificado como Miguel Perchan Mora, perdió la vida tras lanzarse al vacío desde un puente en Barranquilla. 

El hecho se registró el pasado 16 de diciembre en un puente de la Avenida Circunvalar con Cordialidad de Barranquilla. Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 10:30 de la mañana  cuando, de acuerdo con el reporte de las autoridades y testigos, al parecer, Perchan Mora se habría lanzado al vacío desde lo alto del puente. Una caída de unos 4 metros.

Arminta López, testigo, aseguró que el hombre, de unos 70 años llegó a la mitad del puente, oró en voz alta durante varios minutos, se empezó a desnudar y acomodó la ropa a lado. Aunque varias personas trataron de atajarlo y persuadirlo, lo único que el fallecido decía es que le dolía mucho la situación que atravesaba Venezuela y los venezolanos tanto los que están en Venezuela como los que emigraron. Finalmente el abuelito se terminó lanzando de cabeza ante la mirada atónita de la ciudadanía.

La muerte fue instantánea. No se sabe quién, pero un hombre tomó las vestiduras de Perchan Mora y las acomodó junto al cadáver, en orden, luego desapareció, “como se hubiera esfumado”, relataron los testigos.

Nadie se atrevió a robarle nada a la víctima. Quizá porque el hombre se lanzó del puente con la Biblia en la mano y la misma quedó tirada a su lado.

Allegados al infortunado estaban sorprendidos por su determinación. Expresaron a El Heraldo de Colombia que lo primero que hacía el hombrea diario era arrodillarse y “agradecer a Dios por un nuevo amanecer”.universo.

“Nosotros lo veíamos por acá desde hace dos meses aproximadamente, predicando la palabra, siempre con la Biblia en la mano, o bajo el brazo. Era una persona inofensiva, creo que venezolano, solo hablaba de temas religiosos, era bien, se montaba en los buses a predicar”, manifestó Carlos Zambrano, una de las personas que diario toma transporte en ese punto en el que el venezolano perdió la vida.

Con información de El Heraldo