Los niños venezolanos que necesita Galicia (+Video)
Aficionado a las cartas y con muchas novias. Así era, según cuentan los vecinos de la remota aldea de Quintans, en España, el padre de Marina Castro, un migrante gallego, quien en los años de posguerra emprendió rumbo a Venezuela en busca de un mejor futuro. Como él, miles de gallegos hicieron la misma travesía dejando atrás enseres, pero también trazos de sus vidas, que sepultados por el peso de los años ahora desempolvan sus descendientes venezolanos al regresar a la tierra de sus progenitores.
“Yo ni idea que había jugado a cartas, pero lo de guapo, válgame que era guapo mi padre”, chismosea Marina con una vecina de la aldea recordando ese pasado desconocido de su padre.
Y es que en Quintans, donde sólo habitan 14 familias, todos conocen las vidas de los otros. Ahora también la de la rama venezolana de la saga Castro, que con Marina al frente, ha regresado a Quintans con sus dos hijos de 11 y 14 años.
Por Voa Noticias