Tras el voraz incendio, la catedral Notre Dame estará cerrada al público por hasta 6 años

Ayer el presidente de Francia, Emmanuel Macron, envió un mensaje claro a la nación: la catedral Notre Dame, afectada por un enorme incendio el lunes 15 de abril, iba a ser reconstruida en cinco años, un tiempo que parece poco ante los daños conocidos. Sin embargo, los bomberos y los conservadores aún luchan para que la estructura, seriamente afectada por las llamas, resista.

De acuerdo con lo publicado por el diario Le Figaro, son tres los puntos de la estructura que preocupan a los especialistas: la bóveda interior y dos hastiales, esas partes superiores en forma triangular que presenta la fachada. Uno de ellos es el que está ubicado entre los dos campanarios; el otro, en la parte norte de la catedral.

“Esta mañana han llegado compañías para remover los escombros y el resto de la estructura del techo, lo que amenaza el derrumbe de la bóveda”, declaró el ministro de Cultura Franck Riester, quien además aseguró que los conservadores deberían poder entrar de manera segura a recolectar pinturas y esculturas para albergarlas en el Museo del Louvre. Allí serán reparadas.

Por otro lado, el rector de la iglesia confirmó que la catedral estará cerrada al público hasta seis años. “Un segmento de la catedral ha quedado muy debilitado” por las llamas, dijo el obispo Patrick Chauvet en un encuentro con empresarios locales, sin brindar mayores detalles.

Asimismo, las autoridades deberán enfrentar otros desafíos tras el fin del incendio que comenzó en la tarde del lunes y que duró en total cerca de doce horas. Entre ellos, la falta de artesanos calificados y el debate sobre las modalidades de la reconstrucción de Notre Dame.

“Encontrar suficientes artesanos capaces de trabajar la piedra, la madera, el plomo, el vidrio (…) es un desafío para el sector en toda en Europa“, declaró Francis Maude, director del estudio de arquitectura Donald Insall Associates, con sede en Londres. “Otros grandes proyectos enfrentan las mismas dificultades, como el Palacio de Westminster, en el que trabajamos en Londres”, agregó.

Esta falta de mano de obra “podría ser elemento clave que determinará el ritmo y quizás algunas de las decisiones que se tomen en el proceso de restauración” de Notre Dame, dijo el arquitecto, cuyo estudio fue solicitado para trabajar en la restauración del castillo de Windsor (oeste de la capital inglesa).

Para Maude, el tema del respeto de la arquitectura original de Notre Dame podría provocar “serias discusiones” para su reconstrucción porque “algunos pensarán que la única forma de restaurar Notre Dame es exactamente como antes” y otros entenderán que algunas partes de la catedral parisina podrían modernizarse para hacerla más segura.

Las piedras

Pero, según el profesional, habrá que esperar varios meses antes de que se termine la limpieza y que se evalúe los daños para determinar lo que se puede hacer.

“Hay una dificultad en particular que se me ocurre: el hecho de que la catedral esté construida en gran parte con piedras calcáreas”, explicó Maude, quien contó que esta piedra, expuesta a temperaturas de más de 800 grados, “se descompone por reacción química (…) y es entonces difícil utilizarla de nuevo”. “Imagino que habrá gran parte de la superficie histórica de la obra que estará perdida, pero habrá quizás piedras más adentro en las paredes que podrán ser reutilizadas”.

Recuperado

“Desgraciadamente el gallo se quemó”, había asegurado ayer Patrick Palem, consejero de la empresa de encargada de restaurar varias de las obras de Notre Dame, sobre la figura que coronaba la aguja y que sobresalía de la ciudad a más de 90 metros de altura. Sin embargo, horas después, la noticia sorprendió a todos: el gallo había sido encontrado, lastimado, entre los escombros, pero a salvo. Había sobrevivido al incendio y al derrumbe de la aguja, la “Flèche” como la conocían los franceses, una estructura de 750 toneladas construida encima del altar de la iglesia.

El gallo iba a ser descolgado en junio para ser enviado a los talleres de la Socra (Restauración y Conservación de Obras de Arte y Monumentos históricos). Confeccionado en cobre, alberga según la Iglesia reliquias de Santa Genoveva y Saint Denis, así como un fragmento de la corona de espinas de Cristo.

Información de AFP