El èxodo venezolano deja sin profesores, médicos y electricistas al país
Un niño de nueve años de edad salió rápidamente de su salón de clase, lo cual provocó que el profesor suplente lo persiguiera por el pasillo del colegio. Lo ideal sería que lo llevaran a la oficina de Romina Sciaca, quien es consejero de la institución educativa. Sin embargo, es parte de los empleados que salieron de la escuela primaria Aquiles Nazoa.
Venezuela está sufriendo una de las migraciones más elevadas en la historia moderna. El mercado laboral en el país está causando un colapso en la vida cotidiana y privando a la nación de su futuro. El éxodo es amplio y profundo: emigran médicos, ingenieros, trabajadores del petróleo, conductores de autobuses y electricistas, reseño The Washington Post.
Se Educa, un grupo educativo sin fines de lucro, indicó que 48.000 mil docentes renunciaron en el país, lo cual representa 12% del personal en las escuelas primarias y secundarias venezolanas. Se ha unido una estampida de venezolanos que abandonan el país para escapar de la escasez de alimentos.
En la escuela primaria Aquiles Nazoa, Sciaca fue el primero en irse del país mientras que un profesor de segundo grado renunció unos meses más tarde, dejando atrás sus estudiantes y un salario que la hiperinflación redujo a 29 dólares mensuales.
La directora Deliana Flores ha intentado encontrar reemplazos calificados. A medida que los maestros se van, algunos grados en las escuelas pasan hasta varios meses sin clases. En Aquiles Nazoa, los niños de tercer grado se quedaron en casa por dos semanas.
Durante los primeros cinco meses de 2018 aproximadamente 400.000 venezolanos han emigrado del país, después de los 1.800.000 que salieron en los últimos años. Sin embargo, esos números no capturar por completo el total del éxodo. Los trabajadores humanitarios que lidian con la crisis en las naciones limítrofes dicen que un promedio de 4.600 venezolanos se han ido por día desde el 1° de enero.