Crecen casos de varicela en el país por falta de vacunas
Una nueva amenaza se cierne en los niños del ala de nefrología que se encuentran recluidos en el Hospital Infantil J. M. De Los Ríos y es que además de las bacterias que tienen contaminada el agua y las máquinas con las que se realizan sus tratamientos, ahora un caso de varicela los mantiene en cuarentena, reseña El Universal.
“La cuarentena es una medida de prevención. El hecho de que no haya casos no quiere decir que no los vaya a haber porque puede estar en periodo de incubación”, informó la galena.
Sin embargo, la varicela, o lechina como se conoce popularmente, ha tenido varios repuntes desde el año 2015 en gran parte debido a que la vacuna no la hay en el país, ni en el sector privado y mucho menos en el público señaló José Félix Oletta, exministro de Salud y miembro de la Red Defendamos la Epidemiología, quien agregó que en el año 2015 los casos en total fueron 55.311, mientras que el 2016 -hasta la semana epidemiológica 52- cerró con 31.776 casos.
Agregó que este año no se tienen cifras de ninguna enfermedad de registro obligatorio debido a la censura que el Ministerio para la Salud mantiene de las cifras oficiales.
Sin vacunas
El problema del incremento de la lechina no es algo nuevo, a principios de año Salud Miranda denunció que los casos de varicela en la entidad estaban creciendo a un ritmo alarmante.
Para ese entonces, Luis Echezuría, epidemiólogo de Salud Miranda, informaba que la vacuna contra esta enfermedad no existía en el país y que muchas personas acudían a la ciudad de Cúcuta, en Colombia, para colocarle la vacuna a los niños.
Y es que la varicela es una enfermedad que afecta principalmente a los menores de uno a ocho años de edad.
Su transmisión es de persona a persona y esta ocurre si se tocan los líquidos de una ampolla o si la persona enferma tose, estornuda o habla muy cerca. El virus varicela zolter es el que produce la varicela y es una enfermedad prevenible gracias a la vacuna.
La también conocida lechina se caracteriza por presentar ampollas que pican en todo el cuerpo, primero éstas aparecen en la cara, la parte media del cuerpo y el cuero cabelludo para después extenderse por todo el cuerpo.
El sarpullido aparece de 10 a 21 días después de haber tenido contacto con alguien que tenía la enfermedad y entre los síntomas con los que se manifiesta la lechina están: la fiebre, dolor de cabeza, estómago y por supuesto las ampollas una vez que éstas aparezcan.
Los galenos recomiendan no rascarse las ampollas, si se rompe la ampolla ésta puede llegar a infectarse y dejar una cicatriz debido a la infección. Asimismo el enfermo debe usar ropa de cama fresca, suave y suelta para que piquen menos las ampollas. Los baños de agua tibia con poco jabón calman la irritación y también se debe evitar la exposición al calor o la humedad, así como echarse cremas que hidraten y calmen la piel.
Una persona con varicela debe ser aislada para no contagiar a los demás y debe volver a su rutina, sea colegio o trabajo, una vez que las ampollas se hayan secado y formado una costra.
La vacuna es el método de prevención más efectivo para la varicela aunque en el país no se encuentra.
Belén Arteaga, jefa del Servicio de Nefrología, explicó que hasta los momentos no hay ningún niño con varicela y que la medida se realizó por prevención debido a que la mamá de uno de los enfermos renales se contagió.