Dirigente de PJ asesinado en Agua Salud fue “confundido con un malandro”

Dirigente de PJ asesinado en Agua Salud fue “confundido con un malandro”, dice su esposa | Foto: Williams Marrero / El Nacional

El dirigente de Primero Justicia, Orwin Mena, fue asesinado el pasado viernes. El joven de 30 años de edad habría sido alcanzado por un proyectil durante un tiroteo que se registró a pocos metros de la estación Agua Salud del Metro de Caracas.

Su esposa Zulimar Gil aseguró que fue señalado por las autoridades de delincuente. “La policía solo me dijo que mi esposo había participado en un enfrentamiento con funcionarios del Cicpc“, explicó.

“Él era licenciado en Administración de Aduanas y dirigente opositor. Cómo lo van a confundir con un malandro. Aquí los funcionarios matan gente inocente y para montar sus procedimientos alegan que eran delincuentes”, expresó consternada.

Orwin Mena | Foto: Cortesía

Según el relato de su cónyuge, la vícitma salió el viernes en la mañana a llevar a su hija mayor al colegio en El Paraíso y luego se dirigió al 23 de Enero a una actividad de Cine Foro, organizada por sus compañeros de tolda.

A las 7:00 pm culminó la jornada y le dieron la cola hasta la estación Agua Salud. Al frente ocurría un tiroteo entre delincuentes y funcionarios de la policía científica. En el intercambio de disparos el dirigente fue alcanzado por un proyectil.

De acuerdo con lo reseñado por El Nacional, preocupada porque habían transcurrido varias horas y Mena no llegaba a la casa para cenar, su esposa –que tiene cinco meses de embarazo– salió a buscarlo en compañía de otros familiares.

“Mi esposo no cargaba celular porque se lo robaron hace varios días, por lo que contacté a sus compañeros. Me dijeron que lo habían llevado a la parada y no supieron más de él. Fuimos a hospitales, a la Fiscalía y allí nos recomendaron que acudiéramos a la morgue de Bello Monte. En esa dependencia lo encontré y no portaba documentos de identidad”, relató.

Cuando acudió al Cicpc a pedir explicación sobre lo ocurrido, los funcionarios solo le dijeron que un grupo de detectives que hacía labores de investigación por la zona lo vieron en una actitud sospechosa y una vez que le dieron la voz de alto Mena sacó la pistola y los enfrentó.

“Lo tildaron de delincuente, cuando él era un luchador social. Era el sostén de la familia. Vivía para mantenernos y pese a la situación del país estaba ilusionado con la llegada de su tercer hijo, que no podrá conocer por culpa de la violencia”, sentenció.

Los parientes acudirán hoy a la Fiscalía para solicitar que se inicie una investigación. “Los funcionarios que participaron en ese procedimiento deben ser sancionados. Ya basta de tanta impunidad y abusos”, concluyó.

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