Denuncian que militares presos en La Pica sufrieron atropellos y vejaciones tras requisas
Nuevamente denuncian que militares, detenidos en los meses de Abril y Mayo de 2014, acusados de revelarse contra el régimen de Nicolás Maduro, son objeto de presuntos tratos vejatorios, abusos y atropellos de parte de sus propios compañeros de armas, quienes presuntamente no cesan de amedrentar.
El día 10 de enero en horas de la noche, militares vestidos de civil con chalecos negros, presuntamente pertenecientes a la Dirección General Sectorial de Contra Inteligencia Militar (DGSCIM) y custodios de los penales, entraron a las celdas del General de División Oswaldo Hernández Sánchez, preso en el Deprocemil Occidente de Santa Ana estado Táchira; del Coronel José Gregorio Delgado Vásquez; del Teniente Coronel Ruperto Chiquinquirá Sánchez Cásares, Mayor Víctor José Ascanio Castillo, Capitanes, Nery Adolfo Córdova Moreno y Andrés Ramón Thomson, presos en el Deprocemil Oriente, La Pica, estado Monagas, y les realizaron fuertes requisas llevándose algunas pertenencias.
A los abogados y familiares de los militares quienes están acostumbrados a todo tipo de vejámenes y abusos, les preocupa la seguridad de sus hijos, padres, esposos, hermanos, tíos, sobrinos y amigos, que fueron encarcelados, violándoles todos sus derechos a quienes ya van a cumplir tres años privados de su libertad injustamente.
Es sabido que los mismos jueces y fiscales manifestaron que, ellos cumplían órdenes superiores.
Según Nota de prensa, los afectados enviaron un contundente llamado a las autoridades a dejar la represión contra personas honradas y decentes que están en espacios reducidos, donde no pueden albergar tanques de guerra, ni ametralladoras, ni cañones, ni granadas, ni aviones, ni fuerzas armadas, pues a duras penas el limitado espacio les permite su sobrevivencia.
Y demandan que atiendan las precarias necesidades de los privados de libertad, que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela les obliga a atender.
Asimismo insisten en que las autoridades deberían desarmar a las bandas armadas que negocian con la vida de los indefensos en las cárceles y combatir, desmantelar y perseguir los cientos de asaltantes, grupos y fuerzas paramilitares, guerrilleros y narcotraficantes que tienen azotado el país y que muchos de este mismo gobierno inmoral e hipócrita ha contribuido a formar y mantener.
Finalmente reiteran que la consciencia, los principios y los valores benignos no se pueden encarcelar.
Con información de Nota de prensa