Comprar uniformes escolares se convirtió en un desafío para todos los venezolanos

La crisis se ha apoderado de Venezuela, ante los retos que viven todos los venezolanos día a día, para comprar cualquier producto o pagar algún servicio. El país atraviesa el peor momento de inestabilidad desde hace mucho tiempo, pues el poder adquisitivo se ha perdido notablemente, y la inflación consume al venezolano.

La población en general debate sobre un tema en común: “Los uniformes estudiantiles”, y es que se aproxima el inicio del período escolar, y los padres están aterrados por los altos precios de los uniformes y útiles escolares.

Se ven las tiendas casi vacías, porque la población venezolana ha decidido gastar su sueldo en comida, antes que en uniformes; otros, por su parte, lo compran y piden dinero prestado a algún familiar para comprar algún producto para comer.

“Mi salario y el de mi esposa no alcanzan para comprar los útiles para mis tres hijos. Comemos o los vestimos a ellos”, señaló un entrevistado por El diario El tiempo.

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Las franelas y camisas escolares están aproximadamente entre los 6.000 y 7.000 bolívares, y ni se hable de los zapatos, pues rondan entre 25.000 y 30.000 aproximadamente.

Algunos consumidores hicieron referencia a que los Clap, distribuirían uniformes escolares, cosa que aún no se ha cumplido, pero siguen con la esperanza de que ocurra, pues el hambre pelea contra el estudio de sus hijos.

Para el venezolano, este nuevo año escolar es un completo desafío; y  ahora con el aumento salarial del 1 de septiembre, la desesperación se apodera de padres y madres que luchan por la educación de sus niños.