Se tatúa una cicatriz para animar a su hijo con cáncer
Movido por su amor paternal, Josh Marshall realizó una acción que ha conmovido a los usuarios de Facebook y otras redes sociales. Este padre de familia decidió tatuarse la imagen de una cicatriz para animar a su hijo que padece de cáncer y que a causa de ello tuvo que someterse a una operación en la cabeza.
Gabriel Marshall, un pequeño de 8 años de Kansas (EEUU), fue diagnosticado el pasado año de un astrocitoma anaplásico, un tipo de tumor cerebral maligno. La única forma de salvarle la vida era someter al pequeño a una complicada operación en la que le extirparían el tumor, reseña el diario 2001.
Debido a esta intervención, la cabeza del menor quedó con una cicatriz de tamaño considerable. Según informa el portal BuzzFeed, Gabriel admitió que se sentía como un “monstruo” a causa de la marca en el lado derecho de su cabeza. Su papá quiso animarlo y apeló a su creatividad.
Josh Marshall se tatuó la misma cicatriz en el mismo lado de su cabeza. “Ahora, si alguien quiere mirar, nos mirarán a los dos”, le dijo el padre a su hijo tras mostrarle lo que había hecho. Una foto en la que se aprecia a ambos con la misma marca fue compartida en Facebook y se viralizó de inmediato.
En lo que respecta a la salud del menor, este todavía tiene algo del tumor en su cerebro, pero ahora su diagnóstico es estable. “Él está bien, todo marcha bien a nueve meses de la intervención”, reveló Josh Mashall, considerado ahora en las redes sociales como el “padre del año”.