El embarazo precoz un circulo vicioso en Venezuela

Embarazo precoz/Foto referencia

El doctor Abache, director de la Asociación Civil de Planificación Familiar (Plafam), explicó que el embarazo precoz o el embarazo en adolescente actualmente en Venezuela se ha llegado a convertir en círculo vicioso el cual se refleja en la mayoría de las familias que se encuentran en un estrato social bajo.

Según nota de prensa en La Patilla, el doctor Abache dijo que “la región de Suramérica tiene una altísima tasa de embarazos en adolescentes y Venezuela, lamentablemente, está en primer lugar”. No hay como tal una razón concreta para estas situaciones, dice el especialista que es algo que va más allá de la situación, más bien se trata de un problema que ya se ha naturalizado porque la mayoría de los adolescentes que se ven envueltos en un embarazo a muy temprana edad responde, de cierta forma a que han sido criados por familiares a los cuales también les sucedió lo mismo.

“Se decía que esto obedecía a que las niñas no tenían educación ni información adecuada sobre estos temas. Pero un estudio muy serio realizado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Fondo de Poblaciones de las Naciones Unidas y la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Venezuela, mostró que en ese grupo etario, de cada 10 adolescentes – mujeres y hombres – que conocían de métodos anticonceptivos, solo 1 los utilizaba”, explicó el especialista.

Es decir, que no ha sido por desconocimiento de los mecanismos de protección sexual, ya que actualmente la información está en todas partes, cosa que debería disminuir los índices de embarazo en el país. La realidad es que se trata de “niñas y muchachos que a su vez son hijos y nietos de adolescentes. Es una situación que se naturalizó. Por eso decimos que se trata de un problema socio-político, algo que va más allá de la actual situación del país, y en lo cual hay que hacer un gran trabajo”, añadió Abache.

Una de las posibles explicaciones sobre que ocurra el círculo vicioso puede responder a que la joven para escapar de una realidad o para salir de su casa e independizarse se embaraza, y en muchas ocasiones quedan siendo mujeres solteras a cargo de una nueva criatura en el mundo. “Creen que embarazarse es un mejor proyecto de vida, pero en realidad lo que hacen es perpetuar la situación, que es lo natural en estas familias menos favorecidas (…) El trabajo que tenemos que hacer es desnaturalizar lo que ellos han naturalizado”, aseguró el médico. Recordemos que las personas de estrato social bajo o pobres, normalmente son familias numerosas y que no pueden mantenerse bien económicamente, cosa que afecta muchísimo.

RECOMENDACIONES

Hay que “trabajar a fondo con los adolescentes, no negándoles la libertad para que expresen su sexualidad, sino ayudándolos para que sean responsables al momento de hacerlo”, abrir comunicación entre adultos y jóvenes podría llegar a mejorar la relación y puede que abra la compresión de los muchachos para evitar las fallas que éstos puedan cometer.

No se tiene que discriminir ni recriminar a un adolescente que desee explorar su sexualidad, sin embargo es recomendable apoyarlo en el proceso.

“Hay que abrir consultas amigables para ellos. Hemos observado, tanto en Venezuela como es otros países de la región, que muchas veces son objeto de críticas o discriminación por el hecho de que una muchacha de 15 años acuda a una clínica de planificación familiar. Desde el portero, y muchas veces hasta el mismo médico, las recriminan por querer iniciarse en la sexualidad siendo tan jóvenes. A esas muchachas las tenemos que recibir y con mucho tacto decirles las cosas como son, sobre todo en cuanto a los métodos anticonceptivos, y explicarles también sobre mejores proyectos de vida posibles, como el estudio, para salir de su situación de pobreza”, aseveró el especialista.

VALORES

Por otra parte, el hombre quien es uno de los participantes en el acto sexual, ha optado por acostumbrarse a no hacerse responsable de sus actos. Es decir, ha habido una crítica pérdida de valores que hace falta rescatar, “hace muchos años, a los niños los vestían con pantalón corto hasta los 14 años. Al llegar a los 15 les ponían los largos y le decían ´ya usted es un hombre’. Muchas veces, al morir el padre, los adolescentes se convertían en el hombre de esas familias. Hoy ya no sucede así”, contó el especialista.

Por lo tanto, habrá que hacer una gran labor social que pueda rescatar los valores perdidos, una familia que no puede sostenerse así misma está expandiéndose y no hay orientación que pueda frenar la situación, en muchos casos hay violencia, maltrato y conflictos psicológicos que afectan no solo a un pequeño grupo sino a una gran comunidad, aseguró el médico.