La crisis económica opaca a los carnavales venezolanos
La actual crisis económica que se vive en Venezuela tocó la puerta de las fiesta del rey Momo, publicó el diario colombiano.
Los carnavales venezolanos solían ser una de las fiestas más alegres pero este año se nota la reducción de movimiento, escasos desfiles y disfraces reutilizados al igual que la poca afluencia de turistas a las playas.
El diario colombiano agregó que solo en las playas de los estados Miranda y Vargas, es notoria la ausencia de turistas en las arenas donde antes no cabía un alfiler, reseñó El Tiempo.
Por su parte el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, estimó en 40 por ciento el descenso del número de visitantes en el estado que lidera y lamentó las perdidas en empleos y recursos que usualmente fluyen durante el asueto.
La poca presencia de temporadistas también fue notable en los terminales de Caracas, para viajar hacías las playas y lugares turísticos cercanos a la ciudad.
La pérdida de visitantes no es para menos cuando todos los cálculos apuntan a que solo un día de playa para una familia de cuatro personas puede costar lo mismo que un salario mínimo (9.000 bolívares, 45 dólares a la tasa oficial más alta), solo en comida y transporte, sin pasar la noche en unas posada.
REPETIR LOS DISFRACES DE AÑOS ANTERIORES
Las madres han hecho maromas para cumplir con el anhelado disfraz de los niños. Desde repetir los disfraces de años anteriores hasta adaptar las ropas de adultos con un buen maquillaje han suplido la costumbre de comprar el disfraz de moda, sea Iron Man, El Zorro o la princesa Elsa de la película Frozen, que de más sencillo a más complejo su precio oscilaba desde los 8.000 bolívares hasta los 15.000.