Simón Calzadilla| Foto: Archivo

El segundo vicepresidente de la AN, Simón Calzadilla, indicó este jueves que el gobierno aún no termina de reconocer que las políticas económicas llevadas a cabo en los últimos años han fracasado, y que la crisis que atraviesa Venezuela amerita una rectificación por parte del Jefe de Estado, reseña Sumarium.

Así durante una ponencia una ponencia efectuada en medio del foro Perspectivas Institucionales 2016.

“Les tocó gobernar en medio de la mayor expansión de precios petroleros, con una dosis de renta jamás vista, con una AN casi a su entera disposición y con la ventaja de haber pasado por las décadas de los años 70, 80 y 90 en las que se cometieron aciertos y errores de los que se pudo haber aprendido con el fin de no repetirlos y trabajar en procura de soluciones a los graves problemas que afectaban al país en aquella época, se tuvieron los recursos pero faltó la voluntad política”.

Seguidamente, destacó que el fallecido presidente Chávez desaprovecho una de las épocas más proliferas del país, y que la situación actual de Venezuela amerita una profunda rectificación. “Quién hoy es Presidente al recibir la banda lo primero que debió haber hecho fue ordenar un diagnóstico a la economía”.

“Quizás Chávez hubiese reconocido que se amerita cambios, pero Nicolás Maduro no tiene el liderazgo para decirle a los seguidores que aún puedan tener que el presidente “supremo” no era tan supremo y que estaba equivocado”, aseveró el segundo Vicepresidente de la AN.

Asimismo, aseguró que “el Gobierno sigue sin asimilar que perdió la institución madre de la democracia que es la AN y por ello las acciones descabelladas e incoherentes que ejecutan y que deteriora más su credibilidad”, al tiempo que añadió que “no tienen idea sobre qué hacer ni para solucionar los problemas de todo tipo que tiene el país pero tampoco para taparlos, por eso es que viven haciendo teatro”.

Caracazo

Simón Calzadilla destacó que la crisis económica que atraviesa la nación, es propicia para que se repita un caracazo. “en ese momento la gente salió a las calles a saquear en busca de comida y hubo de todo, pero si la gente bajara de los barrios hoy a dónde va a ir a buscar la comida que no hay o los medicamentos que no existen”. Ese cansancio y frustración que tiene la gente debe representar un gran dolor de cabeza tanto para el Gobierno como para las Fuerzas Armadas.

“Es por ello que nos toca jugar un papel delicado pero siempre de cara a los venezolanos desde la AN quién ahorita es la única institución que goza de verdadera legitimidad, siendo una referencia rectora que evite que el país termine en un drama espantoso que complique más la situación”, finalizó.