Veppex “indignado” con la decisión del TSJ

 La Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) expresa su profunda indignación y absoluto rechazo por la excesiva y errónea decisión tomada por la sala electoral del Tribunal Supremo de Justicia de suspender la proclamación de cuatro diputados electos por el estado Delta Amacuro en las pasadas elecciones del 6 de diciembre.

Dicha medida que afecta a tres diputados de la oposición y uno del oficialismo es un intento desesperado y muy burdo para crear confusión y buscar de manera irresponsable e ilegal que no se instale la nueva asamblea nacional el próximo 5 de enero, lo cual jurídicamente es imposible.

Esta absurda y aberrante decisión que busca desconocer la voluntad del pueblo de Venezuela no debe ser acatada y no debe impedir bajo ningún concepto la instalación el próximo 5 de enero de la nueva asamblea nacional elegido por votación popular el pasado 6 de diciembre.

Es imperante que los 112 diputados electos mantengan la unidad como un bloque como lo han hecho hasta el momento y defiendan la voluntad y la confianza del pueblo depositada en ellos.

Hacemos un llamado enérgico a toda la sociedad venezolana a acompañar el próximo 5 de enero a los 112 diputados electos a que tomen posesión e instalen la nueva asamblea nacional, el pueblo debe y tiene que estar al lado de los diputados electos para juntos defender la voluntad de la mayoría, bajo ningún concepto, los diputados deben llegar solos a la sede de la asamblea nacional.

Igualmente hacemos un llamado a los miembros de la Fuerza Armada Nacional a que cumplan con su rol de la policía de la constitución nacional, protejan la integridad y la seguridad de los diputados electos así como del pueblo que los acompañe. Y de seguir Nicolás Maduro a través de su retórica de odios y del Poder Judicial actuando como un cartel de delincuentes intentando desconocer la voluntad del pueblo expresada el 6 de diciembre y desconociendo y torpedeando al poder legislativo, entonces utilizar las armas que la República les dio para proteger la soberanía nacional del país en defensa del pueblo y de sus instituciones haciendo que se respete el imperio de la ley establecido en nuestra constitución nacional en su artículo 333, entendiendo que Nicolás Maduro se consolidaría como una amenaza en contra del pueblo de Venezuela a la que hay que neutralizar con carácter de urgencia.

Nos unimos al llamado que ha hecho la mesa de la unidad democrática en la persona de su secretario ejecutivo, Jesús Torrealba a que los presidentes democráticos de la región activen los mecanismos establecidos en los convenios internacionales para enfrentar regímenes y gobiernos antidemocráticos como el de Nicolás Maduro en Venezuela.