Aunque la crisis lo amerita nada que el gobierno cede y busca el diálogo
Discurso político venezolano se mantiene sin aproximación al diálogo entre el oficialismo y la oposición. Desde ambas bancadas se realizaron declaraciones que no apuntan a una convivencia pronta. El oficialismo, en la persona del presidente de la República, Nicolás Maduro, ha comunicado una clara negativa al diálogo con la oposición, así lo reseña Caraota Digital.
“No es tiempo de cohabitación ni de convivencia con la burguesía, ni con la contrarrevolución ni con el imperialismo; vamos a la gran contraofensiva”, dijo Maduro en el pleno del congreso del Partido Socialista Unificado de Venezuela (Pesuv) que el fin de semana acordó estudiar de urgencia cambios o ajustes en el terreno económico.
Por su parte el dirigente opositor Julio Borges del partido Primero Justicia y posible presidente de la Asamblea Nacional, en representación de la oposición, declaró que “o el Gobierno cambia o habrá un cambio de Gobierno” en un discurso menos agresivo y con flexibilidad al diálogo con el gobierno nacional.
Asimismo, Henry Ramos, secretario general de Acción Democrática, dijo durante una entrevista en Globovisión, en el programa “Vladimir a la una” que “no queremos constituir una trinchera de poder, pero cumpliremos nuestras funciones constitucionales; vamos a dictar la ley de amnistía y veremos si el presidente Maduro la rechaza o no”.
Esa ley, primera oferta de la campaña opositora, liberaría a un centenar de opositores que están presos, condenados o procesados por promover disturbios violentos, o autoexiliados.
Maduro había dicho en un programa de televisión que “no aceptaré ninguna ley de amnistía; así me planto: los asesinos de un pueblo deben pagar”.
Los múltiples intentos de diálogo y los reiterados rechazos oficialistas, según el politólogo John Magdaleno, el “Presidente Maduro arriesga más derrotas si no cambia”
También el cardenal y arzobispo católico de Caracas, Jorge Urosa, pidió en declaraciones a la TV “escuchar la decisión de los ciudadanos en las elecciones parlamentarias y rectificar las políticas que han llevado a la carestía”.