¡SORPRENDENTE! Planta tóxica provoca uno de los peores dolores del mundo
Gympie Gympie no es el nombre más usual que esperarías de una planta. Y si el nombre te parece inusual; el dolor que esta provoca es mucho más inusual de lo que te podrás imaginar; y dicho dolor puede ser causado, tan sólo tocando una de sus pequeñas espinas, informó miscuriosidades.
Esta planta puede parecer bastante inofensiva, sin embargo, como dicen por ahí, no es bueno dejarse llevar por las apariencias; ya que es una de las plantas más venenosas que existen en el mundo y puede ser encontrada comúnmente en las selvas tropicales del noreste de Australia, las Islas Molucas e Indonesia. Y si no te basta con el hecho de saber que es una de las más venenosas del mundo; te aterrarás aún más, al saber que mide alrededor de dos metros.
Si esta planta logra alcanzar el tamaño de un árbol, puede llegar a ser tan peligrosa, que los perros, los caballos e incluso los seres humanos mueren después de una experiencia terrible. Si tienes la suerte de sobrevivir, sentirás un dolor absurdamente severo que puede llegar a durar varios meses. Por otra parte, el dolor puede reaparecer algunos años después. Sus toxinas son tan poderosas que incluso si se seca, se muele y se almacena durante 100 años, puede causar un dolor grave en los que entran en contacto con el polvo.
Sólo las raíces son inofensivas. El resto de la planta se considera mortal y sus hojas tienen la forma de un corazón. Cada planta cuenta con diminutos pelos urticantes con forma de agujas hipodérmicas, incluyendo sus frutos rojizos. Sólo se necesita tocar ligeramente la planta para ser picado, para recibir una dosis de toxina llamada moroidina.
Los botánicos informan que tan sólo estar cerca de esta planta puede hacer que estornudes, que tengas picazón, erupciones y sangrado, causado por pequeñas cerdas que pueden venir de la planta y volar con el viento.
Según el virólogo Dr. Mike Leahy: “Lo primero que se sentirá es una muy intensa sensación de ardor que aumentará durante la próxima media hora, cada vez más y más dolorosa.”
Poco después, las articulaciones pueden doler, y tener una gran herida en las axilas, provocando un dolor extremo si no se retiran todas las cerdas que entraron en la piel, ya que las toxinas pueden seguir siendo liberadas; provocando un dolor extremo que puede llegar a durar un año en algunos casos.
El Gympie Gympie, es una sorpresa desagradable e inesperada de los bosques, causando accidentes a topógrafos, madereros y guardabosques. Incluso los botánicos experimentados que ya conocen la planta a veces se convierten en víctimas.
Los profesionales que se ocupan de la planta usan guantes bastante gruesos, respiradores y tabletas antihistamínicas, así como ropa especial para proteger el cuerpo.
Uno de los primeros en documentar los efectos adversos de la picadura del Gympie Gympie, fue un residente de Queensland, que informó de que su caballo, después de haber sido mordido por la planta, empezó a comportarse como un loco y murió después de dos horas en 1866.
En 1994, el australiano Ciril Bromley describió la experiencia después de haberse recostado en la parte superior de esta planta. Estuvo postrado tres semanas seguidas en cama, mientras intentaban calmarle el dolor. Se utilizaron todo tipo de tratamientos y medicamentos, pero nada fue efectivo. Él describió el dolor como el más terrible que un ser humano pueda llegar a sentir.
Las curas más conocidas para la picadura de Gympie Gympie, son bastante rudimentaria. Los analgésicos generalmente se prescriben para reducir la exposición a la planta.
Curiosamente, el ejército británico se mostró interesado en el Gympie Gympie, sus propiedades y aplicaciones a finales del año 1968. Un laboratorio ultrasecreto del ejército contrató a Alan Seawright, profesor de patología en la Universidad de Queensland, para obtener las muestras de plantas, afirmando que la intención era investigar una nueva arma biológica