Amenazas de expropiación pesan sobre otros hoteles cercanos a Miraflores
Los empleados aseguran que militares de la Guardia de Honor han manifestado que hay 10 albergues de la zona que serán tomados este año.
Los hoteles Ausonia y Edward que se encuentran adyacentes del Palacio de Miraflores continúan hoy tomados por la Guardia Nacional Bolivariana, y sus empleados no pueden entrar a las instalaciones. Los otros trabajadores de los albergues aledaños temen que se tome la misma medida.
El personal de otros hospedajes denunció que funcionarios de la Guardia de Honor de Miraflores los han acosado con anuncios verbales de que hay 10 sitios similares más que están en una lista para ser expropiados este año.
En el sector se encuentran los hoteles Camino, Madison y Piñango que también pertenecen a la familia Damasco, heredera de las otras dos fondas tomadas el jueves.
El 28 de mayo se publicó en la Gaceta Oficial N° 40669 el decreto 1786 que ordena la adquisición forzosa de los hoteles Ausonia y Edwards, para la ejecución de la obra “Desarrollo de dependencias de enseñanza y de descanso del Cuartel General de División Fernando Rodríguez del Toro, actual cuartel general en jefe Diego Ibarra”, que será llevada a cabo por el Ministerio de la Defensa.
Sin embargo, sus empleados manifestaron que en los dos meses y medio que han transcurrido después del decreto ningún funcionario acudió al lugar hasta el martes 11 de agosto cuando el sargento La Cruz, miembro de la Guardia de Honor, inspeccionó el lugar con el argumento que había un “intento de golpe de estado”. Dos días después, a las 5:50 am, la Guardia Nacional Bolivariana tomó los edificios con armas y equipo antimotín para desalojar a empleados y huéspedes.
No es la primera vez que la Guardia de Honor entra a las instalaciones del Ausonia. Pese a que el hotel tiene 45 años en funcionamiento justo frente al Palacio de Miraflores, es ahora bajo el mandato de Nicolás Maduro y durante el gobierno de Hugo Chávez después del 11 de abril de 2002, cuando comenzaron a tener problemas y cuando les impusieron más normas para poder albergar clientes. En reiteradas ocasiones los militares entraban armados para revisar los dormitorios que tienen ventanas con vista al Palacio porque consideraban sospechoso si alguien toma fotos hacia la edificación gubernamental o permanece un tiempo prolongado observando por las ventanas.
Paola Damasco, dueña de los hoteles Ausonia y Edward, aún no ha rendido declaraciones a El Nacional para explicar las negociaciones que se tienen para indemnizarla por la expropiación. Los 6 empleados del Ausonia y los 20 del Edward aún esperan el pago de sus liquidaciones.